La empresa de siderurgia Sidetur, la mayor acería privada de Venezuela, protestó ayer por la expropiación ordenada el domingo por el presidente Hugo Chávez.
“Lo cierto es que la empresa ha cumplido estrictamente con la regulación de precios decretada por el Ejecutivo Nacional, que mantiene los precios congelados desde el 6 de diciembre del 2006”, aseguró en un comunicado Siderúrgica del Turbio (Sidetur).
“Estas plantas pasan a manos del pueblo. Este es un Gobierno obrerista y proletario. Los que han robado a los trabajadores no son Chávez ni la revolución bolivariana, son los burgueses”, proclamó Chávez al anunciar la medida.
Sidetur, con cuatro acerías y 15 plantas de reducción de desechos ferrosos, produce el 40% de la cabilla del mercado nacional. Chávez, quien el domingo ordenó también la expropiación de seis desarrollos urbanos, mantiene un plan de nacionalización de áreas consideradas “estratégicas”.
Las expropiaciones que se inscriben en el proyecto gubernamental para “la construcción del socialismo” son rechazadas por la oposición y las empresas.