Varios balnearios de California sufren evacuaciones voluntarias de viviendas en peligro por derrumbes, tras la tormenta de lluvia, nieve y vientos que azota el estado dorado de EE.UU. y que obligó a decretar el estado de emergencia en seis condados.
California, el estado más poblado del país con 37 millones de habitantes, tuvo este año un verano frío, un otoño cálido y ahora un invierno con lluvias.
Las predicciones meteorológicas advierten la llegada de nuevas tormentas que afectarían desde California hasta Utah y podrían empeorar la situación en zonas residenciales de riesgos por estar en montañas, indicó una experta del servicio de Accuweather.com.
Según estas predicciones, podrían producirse inundaciones urbanas en Los Ángeles, San Diego, la estación turística en el desierto de Palm Springs y la capital de las apuestas, Las Vegas.
El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, declaró el estado de emergencia en seis condados, incluido Orange y San Bernardino -aledaños a Los Ángeles-, debido al mal tiempo. Y autorizó el despliegue de recursos para ayudar a contener los daños en las vías públicas, luego de siete días de lluvias.
Laguna Beach, uno de los balnearios más exclusivos y frecuentados al sur de Los Ángeles, ubicado en el condado de Orange, una decena de viviendas recibieron órdenes de evacuación durante la noche del martes al miércoles, luego de que una nueva y feroz tormenta azotara el sur de California. En pleno centro de este pueblo costero, con un alto nivel de vida, la playa llegó a sobrepasar la carretera principal por la fuerza de los vientos, mientras las viviendas construidas en colinas arenosas se vieron obligadas a reforzar sus muros con sacos de arena para contener las corrientes de agua.
En el norte de California, donde se encuentra la cordillera conocida como Sierra Nevada, se ha registrado para esta época del año más de 41 cm de nieve en menos de una semana, según el monitor del Centro de Predicción Hidrometeorológica de Estados Unidos.
La nieve y el frío en Europa
La situación de caos y demoras en los vuelos y trenes de Europa, en especial en Gran Bretaña, comenzó a ser superada ayer, pero el alerta de nuevas nevadas hace temer más perturbaciones en los servicios. Los dos aeropuertos más importantes del continente, Heathrow, en Gran Bretaña, y Fráncfort, en Alemania, están volviendo a la normalidad, luego de cientos de vuelos cancelados desde el lunes.
Pero el organismo gestor de los vuelos británicos, BAA, hizo saber que “las compañías aéreas por ahora adoptaron un programa de vuelos reducido”.
El alerta de nuevas nevadas a partir de la noche, sobre todo en Francia, hacía temer nuevos problemas en las comunicaciones y transportes. Ayer, un estudio reveló que los inviernos son más fríos porque hace más calor.
Aunque pueda parecer extraño, los crudos inviernos que azotan Europa desde hace 10 años están relacionados, en gran parte, con el calentamiento climático, según el Journal de Recherche Géophysique. A primera vista, el frío glacial que sufre actualmente Europa parece poco compatible con el alza media de las temperaturas, prevista antes de fin de siglo y que podría alcanzar los 5 ó 6 grados.