Un total de 117 jóvenes fueron detenidos por desórdenes, mientras 31 Carabineros resultaron lesionados
Más de un centenar de detenidos y unos treinta agentes lesionados dejó el jueves una violenta protesta estudiantil en contra de las políticas educacionales del Gobierno de la presidenta chilena Michelle Bachelet, informó la policía.
Las escaramuzas se prolongaron por más de tres horas en pleno centro capitalino, donde Carabineros, la policía uniformada, utilizó chorros de agua y gases para dispersar a los jóvenes, en su mayoría estudiantes secundarios.
Manifestaciones similares se produjeron en otras ciudades del país. Un total de 117 jóvenes fueron detenidos por desórdenes, mientras 31 Carabineros resultaron lesionados durante los enfrentamientos, señaló un informe policial.
La autoridad había prohibido con anterioridad que la manifestación pasara por La Moneda, la sede del Poder Ejecutivo, y a cambio ofreció un recorrido distinto que los estudiantes rechazaron. “Nos vamos a seguir movilizando (…) No los dejaremos gobernar”, advirtió a la autoridad Diego Arraño, el vocero de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), que denunció “excesos” de la policía al reprimirlos. En tanto, el ministro del Interior, Jorge Burgos, lamentó la poca disposición de los estudiantes para aceptar el trazado permitido por la Intendencia de Santiago y aseguró que la policía actuó “conforme a derecho”.
Los jóvenes reclaman, entre otras cosas, que no se les toma en cuenta respecto de la reforma educacional y sus formas de financiamiento un proyecto de ley que se discute actualmente en el Congreso Nacional.
Hace dos días, una veintena de estudiantes secundarios vulneró las barreras de seguridad e irrumpió sorpresivamente en La Moneda, donde desplegaron una pancarta en la que advertían a la autoridad de que se iniciaban nuevas movilizaciones de protesta.
Anteriormente, y con motivo del mensaje anual de la presidenta Bachelet al Congreso Nacional en el puerto de Valparaíso, centenares de estudiantes salieron a reclamar en las calles en contra de la mandataria socialista. En esa oportunidad las manifestaciones derivaron en graves incidentes que dejaron un balance de un muerto, decenas de detenidos y destrozos en el mobiliario público y privado.
La víctima fue un funcionario municipal de 71 años que murió asfixiado por el humo de un incendio en un edificio en el que trabajaba y que fue atacado con bombas molotov por encapuchados que se descolgaron de las manifestaciones.