Hillary Clinton será una excelente presidente y estoy orgulloso de estar junto a ella aquí hoy, dijo Bernie Sanders. Foto: AFP
El senador demócrata Bernie Sanders selló finalmente este martes 12 de julio del 2016 su reconciliación con Hillary Clinton, ofreciéndole formalmente su apoyo en la carrera presidencial estadounidense, lo que crea un frente común contra el republicano Donald Trump.
Clinton “ganó la primaria demócrata y la felicito por eso”, dijo Sanders a decenas de simpatizantes demócratas en Portsmouth (New Hampshire, noreste), con la ex primera dama a su lado.
“Ella será la candidata presidencial demócrata y pretendo hacer todo lo que pueda para asegurar que ella sea la próxima presidente de Estados Unidos”, añadió el septuagenario senador, un autoproclamado demócrata socialista.
“Hillary Clinton será una excelente presidente y estoy orgulloso de estar junto a ella aquí hoy”, dijo Sanders, que cerró su intervención abrazando a su antigua rival, a quien en abril había acusado de no estar “calificada” para llevar las riendas de la primera potencia mundial.
El apoyo explícito de Sanders a Clinton cierra el largo y agrio proceso de las primarias demócratas, a dos semanas de la convención partidaria que debe designar a la exsecretaria de Estado como la candidata del partido.
Y con Sanders de su lado, Clinton exhibe ahora un frente unido contra Donald Trump y un Partido Republicano envuelto en intrigas y divisiones.
“Ahora con tu ayuda, vamos a unir fuerzas para derrotar a Donald Trump, ganar en noviembre y juntos construir un futuro en el que todos podamos creer”, le dijo Clinton.
La candidata ofreció palabras de elogio hacia Sanders y le agradeció su apoyo, aunque entre ambos no hubo gestos de afecto más allá de esas palabras.
“Estoy orgullosa de luchar a tu lado”, dijo. “Somos más fuertes unidos”, apuntó.
“Plataforma más progresista”
El senador libró una batalla más prolongada y férrea de lo esperado contra la exsecretaria de Estado, que obtuvo sin embargo suficientes delegados para asegurarse la nominación a principios de junio.
Sanders se había negado hasta último momento a conceder el triunfo a su rival, aunque hace unos días dijo finalmente, ante las insistentes preguntas de la prensa, que votaría por ella.
Pero prometió que continuará con su “revolución política” para tener un gobierno basado en “justicia económica, social, racial y ambiental”.
El senador enumeró una serie de razones por las que cree que la exsecretaria de Estado de 68 años es una mejor opción que el millonario de 70 años, en especial por su apoyo a los derechos de los homosexuales, el seguro universal de salud y la lucha contra el cambio climático.
“Si alguien piensa que esta elección no es importante, tome un momento para pensar en los jueces de la Corte Suprema que Donald Trump nominará, y lo que eso significa para las libertades civiles, igualdad de derechos y el futuro de nuestro país”, dijo Sanders.
También afirmó que algunas de sus ideas serán incluidas en el programa que el partido debe exhibir en la convención, a finales de mes en Filadelfia, cuando Clinton sea designada oficialmente candidata.
El senador dijo que en las reuniones durante el fin de semana en Orlando hubo “un importante acercamiento entre ambas campañas y produjimos, por lejos, la plataforma más progresista de la historia del Partido Demócrata”.
Aunque aparentemente no hallaron coincidencias en relación al acuerdo de libre comercio TransPacífico, lo dos bandos acordaron una redacción común sobre cambio climático, seguro de salud y aumento del salario mínimo estadounidense a 15 dólares la hora. “7,25 dólares la hora es un sueldo de hambre”, dijo Clinton.
¿Un compañero para Trump?
Donald Trump, que se autoproclamó el candidato garante de la ley y el orden público tras una semana de tensión y violencia entre ciudadanos negros y policías, hará campaña más tarde el martes en Indiana (norte).
El magnate se reunirá con el gobernador Mike Pence, lo que alimenta las especulaciones de que Trump podría elegir al jefe regional como su compañero de fórmula.
Pence ofrecería su experiencia en cargos ejecutivos, así como una percepción de firmeza que podría contrarrestar la presunta imagen incendiaria de Trump.
Pence brindó inicialmente su apoyo al senador Ted Cruz pero se cambió a Trump cuando Cruz se retiró.
El gobernador de New Jersey, Chris Christie, otro potencial compañero de campaña, acompañó a Trump el lunes, en medio de rumores de que el millonario de bienes raíces anunciaría a su compañero en los próximos días.