El alcalde Jaime Nebot recorrió el pasado 18 de abril la av. De Las Américas en donde se realizan trabajos de remoción del puente que colapsó tras el terremoto. Foto: Marios Fuastos / EL COMERCIO
El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, anunció hoy, 25 de abril, que está en contra de la propuesta del Gobierno, de aumentar impuestos para la reconstrucción de las provincias afectadas por el terremoto del 16 de abril del 2016. Sin embargo, dijo que entregará su aporte para ese fin.
El Régimen presentó a la Asamblea un proyecto de ley para financiar la reconstrucción de Manabí y Esmeraldas. El proyecto de ley empezó a tramitarse hoy en la Asamblea, donde el oficialismo tiene mayoría.
En un comunicado emitido hoy, lunes 25 de abril, el Alcalde de Guayaquil señaló que una economía boyante o normal puede soportar impuestos para una reconstrucción, pero una afectada y anémica no. Recordó que Ecuador ya vivía una severo quebranto económico y financiero antes del terremoto, a la que hay que añadir los efectos que en esas materias ha causado y causará el sismo.
Sin embargo, dijo que la reconstrucción de las dos provincias hay que hacerla por solidaridad, civismo y conveniencia general y ecuatorianidad.
Los que más tenemos, dijo Nebot, debemos donar lo suficiente para aportar a dicha reconstrucción. “En mi caso, si no pasa la Ley, calcularé el 0,9 % de mi patrimonio y lo entregaré al Estado para fines de la reconstrucción, sumado a 30 días de mi sueldo, no a los 5 proyectados. La reconstrucción no puede ser tarea exclusiva del Gobierno Central”, señaló el Burgomaestre, quien explicó que los impuestos son inconvenientes por varias razones.
Una de ellas es porque el país está en recesión. El Fondo Monetario Internacional proyectó que la economía ecuatoriana caerá este año 4,5% y el próximo año también estará en recesión. “Y en recesión, aumentar impuestos es recaudar menos, empobrecer a la comunidad e incumplir con el objetivo de la reconstrucción. Un hombre sano puede y debe hacer ejercicio, un enfermo grave del corazón lo hace y se muere”.
Nebot señaló que el proyecto de Ley que envió el Ejecutivo a la Asamblea la semana pasada debe ser reorientado a soluciones eficaces, que cumpla con el objetivo de reconstrucción y dinamice la economía, el empleo y los ingresos en vez de afectarlos. “Hay que reducir el gasto público, pues el Estado debe poner su cuota; por seriedad hay que anunciar que se va a crear un fondo para contingencias (mejor es tarde que nunca); hay que poner en práctica medidas que generen confianza y seguridad jurídica para que venga la inversión, que produce entre otras cosas crecimiento y mayor recaudación por tributos”.
También propuso renegociar la deuda externa, obtener créditos blandos y a largo plazo e instituir incentivos: exoneración por 5-10 años de impuestos para los que inviertan en Manabí y Esmeraldas; lo propio para los que reconstruyan sus propiedades y finalmente las donaciones deben deducirse del impuesto a la renta.