Con una pancarta, Guillermo Trujillo ofrece sus servicios de clases de matemática, entre otras materias. Foto: captura
Las imágenes de Guillermo Trujillo ofreciendo clases de matemáticas en las calles de México se viralizaron en redes sociales. El hombre de 80 años busca la manera de compartir conocimientos pero también de sobrevivir ante la difícil situación en medio de la pandemia del covid-19.
Es así que don Guillermo decidió salir a la calle con una pancarta para ofrecer sus servicios de asesorías para estudiantes. Algunos alumnos acuden hasta su domicilio, en Iztacalco, con citas programadas y les imparte clases en el garage con un pizarrón, una mesa y dos sillas. La historia del adulto mayor fue difundida el 10 de diciembre del 2020 por el medio Excelsior en su página web.
El servicio de Trujillo ha cruzado fronteras ya que no solo lo solicitan desde Ciudad de México, sino que lo buscan personas de Estados Unidos, pero le es imposible ya que no cuenta con la tecnología para hacerlo.
De acuerdo con información del sitio mexicano, los costos de las clases por hora son: primaria, 30 pesos (USD 1,49); secundaria, 60 pesos (USD 2,98); preparatoria, 80 pesos (USD 3,97) y universidad, desde 100 (USD 4,97) a 150 pesos (USD 7,45).
Video: YouTube, cuenta Excélsior TV
“Yo quiero ayudar a los jóvenes a que solventen sus problemas, que no se atoren, que no se queden, que lleguen a la Universidad y que sean buenos profesionistas. Tengo 80 años de edad y creo servir todavía, creo que puedo ser útil todavía”, dijo don Guillermo a Imagen Noticias.
Trujillo recordó que a los 18 años terminó la primaria, continuó con la secundaria y entró a un curso para seguir ingeniería, pero el tiempo y las necesidades económicas le obligaron a dejar su carrera soñada en la Universidad Autónoma Metropolitana.
En hombre dijo al medio local que durante varios años trabajó en empresas de electrónica, pero con la nacionalización de la banca, a los 40 años de edad se quedó sin empleo y a partir de ahí ya no pudo conseguir un trabajo formal.
Posteriormente consiguió trabajo en el Colegio de Educación Técnica (Conalep) y en el Liceo Mexicano Japonés, “pero fue muy efímero todo eso”, comentó y agregó que ahí se dio cuenta que le gustaba la docencia y tenía facilidad para enseñar.
Para Trujillo, al no tener un empleo formal, la situación cada día se complicaba, pero con más de 50 años actualizó sus conocimientos en electrónica digital. Ese fue el paso previo para que definitivamente se animara y decidiera entregar su vida a la docencia.
Durante 25 años se ha dedicado a impartir sus conocimientos de manera presencial con asesorías en matemáticas, física, química, cálculo diferencial entre otras materias que ha aprendido de manera autodidacta.
El sitio señala que actualmente con la pandemia, y con el deterioro de salud, la economía de su familia se ha visto muy afectada. Guillermo tiene problemas de próstata y tiene afectada la visión en el ojo izquierdo, y no ha podido recibir la atención médica.
Pese a toda esta situación, Trujillo no se desalienta y continúa brindando su servicio.