Redacción Sociedad
Por más de dos años ha intentado dejar el cigarrillo, pero le resulta difícil. Jorge Carrillo tiene 34 años de edad y 14 de ellos ha consumido tabaco, aunque ahora empieza a sentir los efectos: camina dos o tres cuadras y se cansa fácilmente. “Los doctores me explican que tengo los pulmones llenos de humo y que eso me impide respirar fácilmente”.
Para dejar de fumar, este quiteño optó por tres mecanismos: chicles especiales, parches y filtros. “Por consejo de amigos compré filtros, los utilicé y eran buenos, pero creo que depende de uno para superar este problema. Yo, por ejemplo, volví con la rutina”. Cada día termina al menos una cajetilla y media.
15 000 muertes al año
En Ecuador, el 28% de la gente ha fumado alguna vez y 15 000 personas mueren al año por enfermedades causadas por el consumo de los cigarrillos.
En la reunión que las autoridades ecuatorianas mantuvieron con el jefe del Programa Nacional de Control de Tabaco de Uruguay, Winston Abascal, se reveló que en el momento los jóvenes fuman desde los12 años.
En las mujeres fumadoras la menopausia aparece dos o tres años antes de lo normal: 40. La fecundidad disminuye y aparecen arrugas de forma precoz.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica es otra secuela frecuente del tabaco.Los filtros son pequeños aparatos que miden hasta dos centímetros de largo y uno de diámetro y se colocan en un extremo del tabaco para que, en el momento de inhalar, los elementos químicos no pasen al organismo, sino que se acumulen allí.
El tema genera debate entre los médicos a escala mundial. Existen especialistas que sostienen que estos aparatos actúan en dos aspectos: disminuyen la cantidad de nicotina que llega al organismo y el fumador tiene menor dependencia y adicción.
En Ecuador, Carlos Salvador, neumólogo y activista en la lucha antitabaco, sostiene que “hasta cierto punto este sistema puede ayudar, pero si el individuo en verdad quiere dejar…”.
Cada tabaco contiene un miligramo de nicotina y -según Salvador- con el filtro ese valor se reduce a entre el 60 y el 80%.
Las empresas que expenden estos productos basan su mensaje al público en que los filtros sirven hasta para cinco cigarrillos y que retienen el 90% de la nicotina que ingresa al organismo.
Cuando una persona fuma, esta sustancia tarda apenas 10 segundos en llegar al cerebro. Con base en este dato, el médico neumólogo del hospital Eugenio Espejo, Carlos Rosero, advierte que el filtro sería útil solamente si retiene el 100% de estos químicos. “Ahora, también pudiera servir si el paciente es un dependiente psicológico y le da un falso sentimiento de seguridad”.
Estudios mundiales determinan que la nicotina es solo un compuesto de los 5 000 que contienen los cigarrillos. Estos llegan a los neurotransmisores del sistema nervioso y se produce la adicción progresiva.
Hace 15 días, el jefe del Programa Nacional de Control de Tabaco de Uruguay, Winston Abascal, estuvo en Quito para asesorar al país en el proyecto de declararlo libre de humo.
Allí, el funcionario dijo que los filtros mezclan el aire con la corriente de humo y que las sustancias tóxicas en el cuerpo son las mismas en cantidad y calidad.
El funcionario llamó la atención de los países para que los Gobiernos apliquen controles rigurosos para determinar si funcionan o no. En Ecuador, el Ministerio de Salud no realiza inspecciones a este tipo de productos. Patricio Jácome, quien es jefe del oficialista Programa de Control del Tabaco, asegura que en el momento se trabaja en el Plan Nacional de
Prevención, pero allí tampoco se topa este tema. “Se crearon los filtros para inducir a la gente la idea de que el riesgo es menor, pero es falso”.
En países como Perú, el Departamento de Normatividad y Control de Servicios Oncológicos del Instituto de Enfermedades Neoplásicas determinó que los filtros no protegen. En 2008, la entidad indicó que hay riesgos por los elementos que causan cáncer. La medicina ha identificado que fumar puede generar hasta 41 enfermedades.
La osteoporosis está en la lista.También se suman 18 tipos de cáncer y el de pulmón es el más frecuente. En Ecuador, el INEC revela que este problema es la segunda causa de muerte entre los tumores (600 casos al año). Primero está el de estómago.
Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también alerta de los efectos que pueden causar los tabacos ‘light’, ‘superlight’ y ‘ultralight’, “aunque se anuncie que estos llevan menos nicotina”. Según Salvador, en el mundo, cada año mueren 5 millones de personas y para 2025 pudieran ser 20 millones. Carrillo acude cada mes al neumólogo para un chequeo de sus pulmones. “Es lo único que puedo hacer por ahora, hasta ver qué viene después”.