París, AFP
Ecuador es “bastante optimista” sobre la candidatura de su diplomática Ivonne Juez de Baki al cargo de director general de la UNESCO, afirmó el lunes a la AFP el embajador ecuatoriano ante esa organización onusiana, Marcelo Vázquez.
“Es una candidatura que está recibiendo mucha simpatía y apoyo en todas las regiones, entonces tenemos bastante optimismo”, aseguró el diplomático a la AFP.
El comité ejecutivo de la Unesco comenzó el lunes a examinar las candidaturas de los nueve aspirantes al cargo de director general que designará la semana próxima, justo antes de la 35ª Conferencia General de la organización.
Baki, ex embajadora de Ecuador en Estados Unidos (1998-2002), ex ministra de Comercio y ex parlamentaria y presidenta del Parlamento Andino, “es la candidata que por su trayectoria, formación y su experiencia personal es la que puede actuar en esta etapa decisiva para la Unesco”, afirmó Vázquez.
Según el diplomático, la etapa que afrontará el nuevo director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), a partir de diciembre próximo, en reemplazo del japonés Koichiro Matsuura, que concluirá su segundo mandato, “requiere el diálogo entre las culturas, el acercamiento entre las naciones y la cooperación para afrontar los grandes desafíos antiguos y actuales”.
La candidatura de Baki a ese cargo ha sido impulsada por el gobierno del presidente ecuatoriano Rafael Correa.
Vázquez subrayó que Baki “tiene raíces culturales de diferentes regiones del mundo, de América Latina y el Caribe y del mundo árabe por su ascendencia”.
Ivonne Leila Juez de Baki, de unos cincuenta años, que también es pintora, nació en Guayaquil (suroeste de Ecuador) de padres libaneses, vivió igualmente en Líbano, Francia y Alemania.
América Latina estuvo al frente de la Unesco solamente una vez, con el mexicano Jaime Torres Bodet entre 1948 a 1952.
El español Federico Mayor Zaragoza dirigió la Unesco entre 1987 a 1999.
Entre los nueve aspirantes al cargo, el favorito es el egipcio Faruk Hosni, ministro de Cultura de su país desde hace 20 años, que cuenta con el apoyo de la Liga Arabe, la Unión Africana (UA) y la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) y que podría convertirse en el primer director general árabe de la Unesco, según una regla no escrita sobre la alternancia regional al frente de esta organización.
Pero declaraciones de Hosni ante el Parlamento egipcio en 2008, afirmando que “quemaría yo mismo” los libros en hebreo que encuentre en las bibliotecas de su país, generaron una fuerte polémica.