Los silos de almacenamiento de Ecuagran son los más grandes del país. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Los dueños de Ecuagran plantean que una parte de las deudas vencidas que mantiene la empresa en el mercado de valores sea saldada a través de una capitalización; es decir, que los acreedores de la compañía pasen a ser propietarios de una parte del negocio.
Según datos de la Superintendencia de Compañías, esta empresa tiene USD 20,41 millones en obligaciones circulando en el mercado de valores, de los cuales, USD 291 562,51 están vencidos hasta el 12 de agosto; es decir, no se pagaron en el plazo previsto.
La propuesta de capitalización se presentó como parte del concordato que los administradores de Ecuagran presentaron el pasado 25 de septiembre a la Superintendencia, que tiene cinco días hábiles para admitir a trámite este proceso de concordato.
Luis Cabezas-Klaere, procurador jurídico de Ecuagran, explicó que, si se admite, la acción permitirá que los acreedores y a la firma que se pongan de acuerdo sobre plazos y mecanismos de pago de las deudas.
El primer paso en el concordato, añadió, es que los acreedores nombren una nueva administración para la empresa. Con los nuevos administradores se definirá cuánto de la deuda se cubrirá con la capitalización a favor de inversionistas impagos y cuánto se cancelará en un plan a largo plazo.
“Con el concordato, lo más probable es que lleguen a cobrar todos los acreedores a largo plazo, con una tasa de interés baja, e incluso podrán hacerse dueños del bien y de pronto, ganar dinero. Si vamos a liquidación, no van a poder cobrar todos, se perjudicaría a los inversionistas”, explicó.
Cabezas-Klaere dijo que Ecuagran sigue operativa, aunque no al 100% de su capacidad, pues por las deudas en el mercado y las denuncias por posible fraude bursátil, han perdido a casi todos sus clientes. “En el momento en que los acreedores tomen la administración, ellos van a salir adelante con el negocio”, señaló.
Pero Ecuagran no es la única con deudas vencidas. Delcorp, una empresa relacionada al grupo empresarial, también tiene montos que no pagó a tiempo y, al igual de Ecuagran, se encuentra intervenida por esa razón por parte de la ‘Súper’ desde agosto pasado.
Entre las instituciones públicas que invirtieron en los papeles que las empresas transaron en bolsa está el Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol), el Fondo del Magisterio y el Banco del Instituto de Seguridad Social (Biess).
El Biess, que invirtió USD 3,72 millones en obligaciones de Ecuagran y USD 1,72 millones en papeles de Delcorp, dijo que iniciará acciones legales para el cobro. Según la Superintendencia de Compañías, en total, Delcorp tiene circulando en bolsa papeles de obligaciones a largo plazo por USD 18,02 millones. De ese monto, USD 761 250,02 se encontraban vencidos hasta el pasado 18 de agosto.
Delcorp también tiene una deuda vencida de USD 21,4 millones con el Isspol, por facturas no pagadas, un instrumento bursátil con vencimiento de corto plazo.
El procurador explicó que aún no se ha decidido si se presentará otro concordato para saldar los compromisos de Delcorp en la bolsa de valores.