Rodrigo Aldaz, quien participó en el proceso del censo, explica las acciones que se hicieron en Selva Alegre y los resultados. Foto: EL COMERCIO.
La Asamblea Popular realizada en la Casa Comunal del barrio Selva Alegre estuvo marcada por los reclamos de los moradores y, posteriormente, por los consensos entre la comunidad y las autoridades del Gobierno central y seccionales. Se la realizó en el marco de las acciones preventivas por el incremento de la actividad del volcán Cotopaxi. Se la hizo a partir de las 17:30 de este martes 29 de septiembre de 2015.
Uno de los puntos que resaltó en esta actividad, que duró cerca de tres horas, fue la presentación de una propuesta ciudadana de un grupo de vecinos de la localidad. Esta iniciativa nació del deseo de obtener información relacionada a las afectaciones a la comunidad en caso de una erupción. Consistió en un censo para levantar información de las familias de la zona, en especial, aquellas que estarían en riesgo.
Por ejemplo, se hizo una encuesta en 651 casas. Aquí habitan al menos 2 238 personas. De estas 45 ya están desocupadas. El motivo: varios pobladores han tomado la decisión de desalojar las viviendas por prevención, ya que cerca de este barrio pasa el río Santa Clara, una de las afluentes por las que bajarían los lahares en una posible erupción.
Rodrigo Aldaz, quien participó de este proceso, afirmó que se hizo este levantamiento porque necesitaban determinar la realidad de las personas. “Pudimos ver que 244 personas necesitan albergues. Se debe trabajar en esto”. Explicó que se han determinado el número de mascotas en las casas y se pudo ver que, incluso, hay personas que han abandonado a los animales y se han ido.
La iniciativa fue resaltada por el ministro coordinador de la Seguridad, César Navas, quien acudió a esta actividad. También, se comprometió a que este censo será tomado en cuenta para la construcción de los planes de contingencia. “Son aportes ciudadanos que ayudan a este proceso”.
En este conversatorio, asimismo, quedó en evidencia la inconformidad de las personas. Los comentarios fueron varios. Hubo moradores que afirmaron que no se sabían las acciones exactas que ha realizado la Municipalidad. Otro de los comentarios fue que no se escuchaban las propuestas de la ciudadanía. Estas observaciones fueron aplaudidas por los asistentes. Sin embargo, cuando el alcalde de Rumiñahui, Héctor Jácome, intentó explicar las acciones, en varias oportunidades recibió la negativa de las personas. Estas se visibilizaron en silbidos y gritos.
Ante esto, Jácome aseguró que se ha trabajado para hacer actividades preventivas en las zonas consideradas de riesgo. Además, hizo dos anuncios. El uno estuvo relacionado con la colocación del sistema de alerta temprana. Se lo inauguraría el próximo miércoles 18 de noviembre de 2015. Otra de sus declaraciones fue que se construirá un muro (obra de mitigación) en el sector de La Caldera, en la parroquia de Rumipamba (zona de riesgo) para sostener el paso de los lahares en una eventualidad. En su intervención, Jácome pedía únicamente paciencia a la comunidad.
La Asamblea Popular terminó con varios acuerdos. Se van a realizar reuniones semanales para analizar el estado de las propuestas. Y se va a potenciar la información por diferentes medios de comunicación: radio y televisión.
Las autoridades se despidieron con la consigna de que el trabajo continúa. Mientras que los pobladores se fueron con la tarea de supervisar estos acuerdos.