Redacción Negocios y agencias
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Las bolsas de valores de todo el mundo cayeron ayer, arrastradas por el derrumbe de las plazas asiáticas. El cierre negativo se dio ante temores sobre la velocidad de la recuperación económica global, en especial de EE.UU. y China.
-1,15 por ciento
cerró el índice bursátil ecuatoriano Ecuindex, según la Bolsa de Valores de Quito.
“La debilidad de Wall Street el pasado viernes influyó en los mercados de Asia y Europa”, indicó el analista David Fineberg, de CMC Markets, aludiendo a que la plaza neoyorquina puso fin a cuatro semanas de crecimiento.
Según el analista económico ecuatoriano, Rodrigo Espinosa, lo sucedido ayer en las bolsas del mundo no es una situación para alarmarse. “La caída es temporal. Si bien ha sido significativa y general, las bolsas de valores están más fuertes que a inicios de año. Eso da la seguridad de que la recesión está pasando”.
Por su parte, analistas de Charles Schwab, señalaron que “quienes apuestan al alza sucumbieron ante el retorno de las inquietudes de que el reciente avance de los mercados bursátiles, en un contexto de señales de reactivación, probablemente superaron la realidad de la economía mundial”.
En eso coincide Espinosa, quien afirma que “el leve retroceso de las bolsas de ayer se explica porque había cierta especulación en los mercados internacionales, principalmente de alimentos y de petróleo. Entonces, la caída, en realidad, es una corrección de esa tendencia especulativa. Y no creo que los precios del petróleo, que es algo que nos interesa, caigan por debajo de los USD 60”.
Sin embargo, para David Jones, de IG Index en Londres, “ la sesión de ayer fue una especie de alerta y puso en evidencia la fragilidad que rodea a la recuperación de los mercados bursátiles”.
El derrumbe fue vinculado a la baja de las materias primas en los mercados internacionales y a temores sobre los resultados de varias empresas chinas. Pero el factor determinante de las caídas fue la decisión de los inversores de apurar la toma de beneficios ante indicios de que el Gobierno chino se apresta a apretar las clavijas del crédito.
Para Carmen Julia Rodríguez, operadora de Portafolio Casa de Valores, el nerviosismo por la crisis aún está latente en el mundo y cualquier noticia es muy sensible para los índices.
“Todavía hay mucho nerviosismo entre los inversionistas. Ayer, en Ecuador también cerramos con una caída. Y, por ejemplo, eso ha impactado en un emisor normalmente fuerte como es Supermercados La Favorita, con la caída de sus acciones. El reparto de utilidades y la incertidumbre político-económica del país influyó en ello. Y, aunque la empresa está muy fuerte para hacer frente a la caída, esa noticia no cae tan bien a los accionistas de la firma”.
Toshihiko Matsuno, estratega de SMBC Friend Securities, en cambio, afirma que “los inversores empezaron a tomar sus beneficios tras haber confirmado que la economía se recupera”.
Por ello, Espinosa asegura que es mejor ser positivos y mirar que la recesión está pasando. “Hay noticias muy importantes a escala mundial. Los crecimientos de Alemania, Francia y, ahora, Japón, muestran que el mundo poco a poco deja atrás la crisis. Y ese efecto positivo también se ve en economías poderosas como las asiáticas, donde hay crecimientos más allá de lo esperado”.