Técnicos de la Alcaldía y el Cuerpo de Bomberos de Quito (CBQ) recorrieron la zona para evaluar las condiciones del canal de riego que pasa por debajo del barrio. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Una inundación se produjo la tarde de ayer en el barrio San José del Molino, ubicado en la parroquia de Guayllabamba, nororiente de Quito, por el desbordamiento del río El Quinche. 35 personas que ocupaban siete viviendas del sector fueron evacuadas por las autoridades tras la emergencia.
César Díaz, secretario de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio, informó que allí existe un canal de riego para los sembríos que lo entubaron años atrás. “Técnicamente, la forma como se hicieron los trabajos de entubamiento no son los recomendables. Por eso se tapa y las empalizadas de tierra que se realizan arriba, para encauzar el río, provocan este desbordamiento”.
Desde temprano hoy, jueves 25 de marzo del 2021, técnicos de la Alcaldía y el Cuerpo de Bomberos de Quito (CBQ) recorrieron la zona para evaluar las condiciones del canal de riego que pasa por debajo del barrio. Además se activó el fondo de emergencia para dotar de alimentos a las
Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Las viviendas afectadas son legales y cuentan con los permisos de construcción. Esteban Cárdenas, comandante del CBQ, contó que la emergencia fue reportada a las 19:50 de ayer y la prioridad fue evacuar a los adultos mayores que se encontraban en las casas. “Hicimos un acompañamiento hasta la medianoche con los moradores y verificamos que estén en buenas condiciones”.
Los vecinos contaron que el agua alcanzó un metro de altura y los enseres flotaban dentro de las viviendas. “Estaba en mi trabajo cuando me avisaron que bajó el agua, no tuvimos tiempo para rescatar las cosas. En un minuto las casas se inundaron”, contó Nathalia Puma.
Ella perdió todos los enseres del hogar. Para rescatar a sus padres, el hijo de Puma rompió el techo de fibrocemento de la casa.
Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Los electrodomésticos de Gary Bravo también se destruyeron. Contó que a las 20:00 su casa ya estaba completamente inundada y no pudo rescatar sus pertenencias. “Ojalá pueda construir un muro en el canal de riego”.
Lenín Charpentier es propietario de la quinta Colón. Recordó que los colchones de su hostería flotaron en el agua. Cortó la electricidad del inmueble para evitar daños más graves. “Cada seis años aproximadamente tenemos emergencias similares. Unas cinco veces nos ha pasado esto. En otra ocasión se fueron abajo los muros”.
La piscina de la Quinta Colón se llenó de lodo y agua. Igual ocurrió en las canchas deportivas y otras instalaciones.