Londres, Reuters
El equipo de Fórmula Uno Renault terminó el miércoles su vínculo con el extravagante director Flavio Briatore y dijo que no impugnará las acusaciones de haber arreglado el Gran Premio de Singapur del año pasado al ordenar a un piloto que choque intencionalmente.
“El equipo Renault ING no impugnará las recientes acusaciones hechas por la FIA (Federación Internacional del Automóvil) respecto al Gran Premio de Singapur”, manifestó la escudería en un comunicado.
“También quiere comunicar que su director deportivo, Flavio Britatore, y su director ejecutivo de ingeniería, Pat Symonds, abandonaron el equipo”, agregó. Renault aclaró además que “antes de acudir a la audiencia ante el Consejo Mundial de la FIA en París -el 21 de septiembre-, no hará más comentarios”.
Está previsto que Briatore y Symonds comparezcan ante la entidad que rige el automovilismo mundial para responder a las acusaciones sobre que hace un año ordenaron al piloto brasileño Nelson Piquet que chocara en Singapur para ayudar a su compañero de equipo, Fernando Alonso, a ganar la carrera.
Rostro familiar
El italiano Briatore llevó a su equipo a ganar dos campeonatos de constructores y de pilotos con el español Alonso en 2005 y 2006, además de haber obtenido títulos con Benetton y Michael Schumacher en 1994 y 1995.
Socio comercial del director comercial de la F1, Bernie Ecclestone, y copropietario del equipo de la Segunda División de fútbol inglesa Queen’s Park Rangers, el italiano es también representante de Alonso.
Rostro familiar en revistas de celebridades y con una vida llena de lujos, el siempre bronceado Briatore -también dueño de un club nocturno- es además una figura importante en la Asociación de Equipos de la Fórmula Uno (FOTA, por sus siglas en inglés). Mientras Briatore se enfocaba en los negocios y la pantalla, Symonds efectivamente llevaba adelante la estrategia de carrera, por lo que su partida será un duro golpe para Renault. No se anunciaron posibles reemplazos.
Exclusión permanente
El presidente de la FIA, Max Mosley, ya había dicho que consideraba el caso como algo más serio que la controversia de espionaje que costó a McLaren 100 millones de dólares en multas y la pérdida de todos sus puntos como constructor en el 2007.
El consejo de la FIA tiene la potestad para imponer diversas penas por conducta fraudulenta, incluida la expulsión de una escudería del campeonato. Renault decidió en agosto prescindir de Piquet, de 24 años, y el brasileño declaró ante la FIA que se le dijo cuándo y dónde estrellarse durante la que fue la primera carrera nocturna de este deporte en Singapur.
En un comunicado publicado posteriormente en medios, el corredor dijo a investigadores de la FIA que se reunió con Symonds y Briatore antes de la carrera del 28 de septiembre pasado en la oficina del director del equipo. “El Sr.Symonds, en presencia del Sr.Briatore, me pidió si podía sacrificar mi carrera en pos del equipo ‘provocando la salida del coche de seguridad'”, manifestó Piquet, a quien la FIA prometio inmunidad de acciones judiciales si decía la verdad.
El brasileño añadió que vivía “un estado mental muy frágil y emocional” en ese momento debido a su incertidumbre acerca de la renovación de su contrato con Renault para el 2009, y que esperó que aquel acuerdo mejorara su posición en la escudería.
“El Sr.Symonds me apartó a un costado y, utilizando un mapa, me señaló el lugar exacto del circuito en el que yo debía chocar”, explicó Piquet en el comunicado emitido el 30 de julio.
Alonso, quien negó conocer semejante plan, ingresó a boxes en la vuelta 12 y Piquet luego chocó en un sector en el que su auto no era fácil de remover, por lo que debió salir a la pista el coche de seguridad.
En adelante, el español se encaminó hacia el triunfo después de que varios rivales fueran penalizados por haber entrado a boxes en presencia del coche de seguridad, una regla que desde entonces fue modificada. El choque causó una especulación considerable en aquel momento, tanto entre equipos como en pilotos rivales.
Symonds, evasivo
Symonds fue evasivo durante una entrevista con los investigadores de la FIA el mes pasado en el Gran Premio de Bélgica, la cual fue facilitada a los medios. Ante la pregunta de si estaba premeditada una colisión en la vuelta 14, expresó: “No quiero responder esa pregunta”.
Symonds luego declaró: “No tengo intención de mentirles. No les mentí, pero me reservó un poco mi posición”. Renault y Briatore han acusado al brasileño y a su padre, ex triple campeón del mundo, de alegaciones falsas y presunto soborno, e iniciaron acciones penales al respecto en Francia.