Berlín, DPA
Escritores de Argentina, Colombia, Ecuador y Panamá participan en Alemania en los festejos por los 200 años de la independencia de varios países latinoamericanos.
Autores como la argentina Tununa Mercado, el colombiano Memo Anjel, el ecuatoriano Leonardo Valencia y el panameño Luis Pulido están participando en Berlín en algunos eventos que las embajadas de los países de la región están llevando a cabo en conjunto con el Ministerio de Exteriores alemán.
La noche del martes, los cuatro escritores protagonizaron el debate “Literatura hacia el Bicentenario” en la sede de ese ministerio, donde se discutió tanto sobre el pasado de la literatura latinoamericana como sobre los nuevos desafíos que enfrentan los creadores de esa región.
El intercambio, donde también participó la editora alemana y especialista en literatura latinoamericana Michi Strausfeld, se enmarca en una serie de iniciativas en torno a la importancia de la escritura en el desarrollo y la identidad de América Latina.
Strausfeld recordó que durante parte del siglo XVI, España prohibió la lectura de novelas en Latinoamérica, por su potencial subversivo y por expresar la verdad de lo que allí sucedía. Según Memo Anjel, el principal problema de la literatura de la región sigue siendo el debate en torno a la identidad latinoamericana. “El trabajo que hacemos en Colombia es un esfuerzo por responder a esa pregunta”, dijo.
Al mismo tiempo, el autor de “La mesa de los judíos” fustigó a las grandes editoriales que insisten en promover novelas cuyos temas se basan en la violencia urbana y ligada al narcotráfico, en desmedro de nuevos autores centrados en problemáticas más globales.
En ese mismo sentido se expresó Mercado, ganadora del prestigioso premio mexicano Sor Juana Inés de la Cruz por el libro “Yo nunca te prometí la eternidad”, cuyo énfasis estuvo en el papel que las pequeñas editoriales están teniendo para difundir trabajos más experimentales que los de las grandes casas.
En ese sentido destacó la próxima edición en alemán del texto “Operación Masacre”, del periodista y escritor Rodolfo Walsh, desaparecido por la última dictadura militar argentina, una obra a caballo entre la crónica periodística y la novela de ficción.
Por su parte, el ecuatoriano Leonardo Valencia destacó que a la literatura latinoamericana le faltan instituciones de promoción de la cultura de la región en Europa. “Eso nos obliga a abrirnos camino de manera distinta”, expresó el autor de “El libro flotante de Caytran Dölphin”, afincado desde hace una década en Barcelona.
Según él, esa falta es en realidad parte del propio legado cultural de la región. Desde otra vereda, para el panameño Luis Pulido un tema central en la literatura actual de su país es la revalorización del Caribe y de la tradición de habla inglesa. “Y no sólo se trata de la influencia de Estados Unidos, sino también del sincretismo producto del flujo migratorio desde Jamaica”.
Para el creador de “Matamoscas”, manifestaciones culturales como el inglés-criollo están finalmente ocupando “el lugar que se merecen en el debate intelectual panameño”.
Durante el evento, el embajador argentino en Alemania, Guillermo Nielsen, anunció que las sedes diplomáticas en Berlín de nueve países que celebran sus bicentenarios este año están trabajando en conjunto para conmemorar cada una de las fechas de independencia.