Los operativos de control se llevaron a cabo al amanecer del viernes 4 de diciembre y los resultados de conocieron este 7 de diciembre. Miembros de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas y la Agencia de Regulación y Control Minero (Arcom) se desplegaron en los sectores mineros conocidos como Barranco Colorado, Río Chico, El Paraíso y campamento La Chorrera en búsqueda de productos ilegales.
El resultado de esta acción conjunta fue el decomiso de grandes cantidades de material explosivo y químico en el cantón Camilo Ponce Enríquez, en Azuay. Además, fueron retenidas tres armas de fuego y más de medio centenar de municiones que aparentemente pertenecen al personal de seguridad de las empresas mineras.
Según explicó el mayor Xavier Solórzano, jefe del Distrito Ponce Enríquez, entre el material explosivo se hallaban alrededor de
2 200 tacos de dinamita y unos 1 200 metros de mecha lenta que, de acuerdo al procedimiento de verificación de la Arcom, no contaba con los documentos de origen requeridos.
De igual forma, esa institución verificó que los lugares de almacenamiento no eran los adecuados, de acuerdo con las normas de seguridad que rigen en el país.
Por el momento, tres personas se encuentran detenidas para investigaciones, pues no pudieron justificar el origen de este material que se encuentra en poder de las FF.AA., hasta que se logre determinar su procedencia. Por su parte, las armas permanecerán en manos de la Policía Nacional para las investigaciones debidas.