Los años que lleva investigando y analizando datos relacionados con el clima en Ecuador y en el mundo hacen que Luis Maisincho esté convencido de que el cambio climático es una realidad que se siente en todo el planeta y cada vez con mayor fuerza.
Tampoco tiene dudas de que la ola de calor que azotó recientemente al Hemisferio Norte se relaciona con ello y la actividad humana.
¿Cuál es el origen de la reciente ola de calor en el planeta?
Las olas son eventos de calor sostenido que puede durar varios días o semanas con temperaturas extremadamente altas en un país, región o continente. Este fenómeno, generalmente, aparece durante el verano o en épocas secas y es amplificado por el desbalance energético de la Tierra debido al incremento de los gases de efecto invernadero en la atmósfera. Hoy en día, debido al desbalance energético, la atmósfera de la Tierra retiene más energía (calor) proveniente del Sol, debido a los gases de efecto invernadero, causando el aumento de la temperatura del aire y por ende olas de calor mucho más marcadas y más frecuentes.
Es decir, la ola de calor es atribuible al cambio climático
Sí, el incremento en la frecuencia y duración de las olas de calor son efectos del cambio climático que, a su vez, son provocadas por las acciones antrópicas de la humanidad. Las olas de calor son el caso más obvio de relación entre el cambio climático y el calentamiento global: si existe más calor en la atmósfera, hará más calor.
¿Por qué se dice que las olas se repetirán hasta 2060?
Las olas de calor se repetirán hasta después del 2060 si las condiciones ambientales actuales se mantienen. Si no tomamos medidas para reestablecer el balance energético de la Tierra, como reducir la emisión y concentración de los gases de efecto invernadero en la atmosfera, las olas se mantendrán en el tiempo y sus efectos adversos pueden ser mucho más graves para el ambiente y el hombre.
¿Qué otros efectos cabe esperar?
Afectar el balance energético de la Tierra puede provocar eventos hidrometeorológicos extremos como olas de calor, inundaciones, sequias, heladas, huracanes, mucho más frecuentes y violentos.
¿Qué datos hacen atribuible el cambio climático a la acción del hombre en la naturaleza?
Los resultados de la investigación científica sobre la evolución del clima confirman que la alteración acelerada del sistema climático es atribuible a las acciones del hombre. Las emisiones de dióxido de carbono y de otros gases están aumentando el efecto invernadero y cambiando la acidez de los océanos. Los niveles de los gases de efecto invernadero empezaron a subir notoriamente hace 220 años con la aparición de la industria y el uso de los combustibles fósiles. Estos recursos la naturaleza los mantuvo almacenados durante millones de años y ahora nosotros los estamos liberando en poco tiempo.
¿Es irreversible el cambio climático?
El cambio climático es un fenómeno que, difícilmente, se puede cambiar o controlar. Algunos efectos del cambio climático ya son irreversibles como el retroceso de los glaciares, incremento del nivel del mar, desaparición de algunas especies animales y plantas. Esos efectos no pueden ser restablecidos de forma artificial.
¿Y si cambiáramos radicalmente nuestros hábitos?
El cambio en la composición de la atmósfera (mayor concentración de gases de efecto invernadero), ha provocado un aumento sostenido de la temperatura; se estima que, en promedio, la temperatura se ha incrementado en alrededor de 1 grado Celsius durante el último siglo y algunos estudios sugieren un incremento de entre 4 y 5 grados hasta el año 2100. Para restablecer los niveles normales de la atmosfera algunos estudios concluyen que, con cero emisiones de gases contaminantes, debemos espera cientos o miles de años. Por tanto, el sistema climático buscará un punto de equilibrio con las actuales condiciones climáticas; bajo este escenario es muy difícil que el clima se normalice o alcance las condiciones pasadas.
¿Cómo incidimos cada uno?
Cada persona contribuye en cierto grado al cambio climático y al efecto invernadero ya que acciones cotidianas como el consumo de productos para nuestra alimentación exige el uso de combustibles fósiles para su producción y traslado; también está la forma en que disponemos nuestros desechos o si preferimos productos orgánicos.
Hoja de vida
Luis Maisincho ocupa, actualmente, el cargo de investigador Científico del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), institución en la que ha laborado por muchos años.
Obtuvo un doctorado (PhD) en Ciencias de la Tierra, Universo y Ambiente, otorgado por la Universidad Grenoble Alpes de Francia.