El grumete Jorge Mora se mantiene estable, recuperándose de las fracturas sufridas el último fin de semana cuando, un taxi en el que viajaba con cuatro compañeros, se estrelló en el tramo San Pablo-Monteverde, en la Ruta del Spondylus (Santa Elena).
Mora fue el único sobreviviente del fatídico accidente de tránsito, ocurrido el domingo. Cerca de las 14:00 se estrellaron contra un bus de la Cooperativa Dos de Noviembre, de placas HAJ-359, que viajaba de Montañita a La Libertad.
“El paciente se encuentra estable y tiene que ser intervenido quirúrgicamente de las fracturas que presenta en la mano y el brazo. Está siendo valorado y podrá ser operado una vez que terminemos de hacer una valoración neurológica”, dijo Augusto Araujo, subdirector técnico del Hospital Naval de Guayaquil. A esa casa de salud, el herido fue trasladado la tarde del domingo.
En el momento del accidente, en el taxi de placas PAB-615, acompañaban a Mora los grumetes Eduardo Palacios, Diego Ruiz, Ricardo Cárdenas y Leonardo Lucas. Los cuatro últimos murieron producto del fuerte impacto.
Ayer, los cuatro fueron velados en la sede de la Escuela de Grumetes, en la Base Naval de Salinas. En horas de la tarde sus familiares recibieron los cadáveres para darles sepultura en sus ciudades de origen. Ruiz era oriundo de Santo Domingo; Lucas, de Guayaquil; Palacios y Cárdenas, de Ambato.
Los cinco aspirantes a marinos viajaban ese día al balneario de Montañita a disfrutar en su día libre cuando se produjo el percance.