Redacción Quito
En la av. Napo, en el sur de la ciudad, a diario se forma una gran congestión vehicular. El cierre de los túneles ocasionó que el tráfico crezca en el sitio.
A pesar de que el trancón que se produce es habitual, los conductores usan el claxon para apresurar a los demás choferes de la fila.
En la intersección de la av. Napo y Pedro Pinto Guzmán, los semáforos permanecen deshabilitados desde las 06:00 hasta las 08:45, esto ocasiona que los conductores activen el pito por períodos largos. Los buseros son quienes más abusan del claxon, tanto para presionar a los automovilistas como para llamar la atención de los peatones. Las cornetas usadas en los buses son los artefactos que más ruido causan. Incluso su uso está prohibido.
El ruido de los carros es considerado como una forma de contaminación auditiva. Según el Municipio, en 14 puntos de la ciudad existe un exceso de 30 decibeles. La norma establece un máximo de 60 decibeles en Quito.
Este incremento del ruido sube el nivel de estrés entre los conductores y peatones, según la Policía Nacional de Tránsito.
Las personas que permanezcan expuestas al ruido por períodos largos pueden incluso sufrir posteriores problemas auditivos.
El uso excesivo del pito es considerado una falta leve de primera clase y se sanciona con la reducción de 1,5 puntos en la licencia y el 5% de un sueldo básico unificado, es decir USD 12.
Los conductores no pueden usar el pito cerca de los hospitales, escuelas, centros de salud y centros para la tercera edad.Un proyecto de la Corpaire pretendía evitar la circulación de vehículos en zonas consideradas delicadas.