Pico y Placa, Hoy no circula, Contraflujos…
Agreguemos los pasos elevados, la ampliación de vías a 4 o más carriles… medidas que no han solucionado la saturación vehicular en las ciudades; entonces, se hace necesario adoptar otras cuyos resultados se verán a mediano y largo plazo; estas deben ser planificadas y ejecutadas mancomunadamente con autoridades nacionales, provinciales y cantonales, pues los centros urbanos se encuentran interconectados por redes viales y el problema, siendo común, exige soluciones concertadas.
Las personas deberían movilizarse en los sistemas de transporte masivo como son el metro bus, tren elevado, aerovía, teleférico, buses articulados, etc., que den servicios de calidad, seguro, rápido y puntual, movidos por energía eléctrica preferentemente; así el usuario va a dejar su auto personal en casa o en parqueaderos cercanos a las estaciones de los centros poblados por donde circulen estos sistemas indicados.
Es importante trabajar paralelamente en la regeneración urbana, planificando lo que se denomina “la ciudad de 15 minutos”, nuevas centralidades en las cuales se concentren los servicios más solicitados por la ciudadanía; así también que se cambie a un modo combinado de teletrabajo y presencial. La finalidad es restringir la movilidad para evitar que las calles de las grandes ciudades como Quito y otras se saturen con automotores, lo que ayudaría a atenuar el calentamiento global, a reducir la emisión de gases de efecto invernadero provocados por la quema de combustibles fósiles.
Los costos requeridos de ejecución son altos, por lo que se debería dejar de subsidiar a la transportación tradicional e invertir en nuevas formas de enfrentar este problema.
Juan Manuel Guamán Andrango
Falta de liderazgo
No se puede negar que el proceso de vacunación del gobierno del presidente Lasso ha sido exitoso, esto lo reconocen hasta sus opositores. Lo que la mayoría de ecuatorianos se pregunta es qué ha hecho por recuperar los dineros robados durante el régimen de Rafael Correa. Si somos justos deberíamos también preguntarle a la Asamblea si ha creado los mecanismos legales para recuperar esos dineros y sancionar a los responsables. De manera que en este aspecto tanto el Gobierno nacional como la Asamblea no han cumplido con esa exigencia de los ecuatorianos.
ejando de lado esto, al presidente Lasso, durante su primer año de mandato, le ha faltado liderazgo para conducir al Ecuador a una verdadera institucionalidad democrática y jurídica. El Ecuador vive todavía bajo la égida correísta, y los ecuatorianos, que votamos por Lasso, queríamos un cambio respecto a eso. Es decir, que cambie las instituciones de fachada que creó el nefasto y putrefacto régimen de Rafael Correa tras acabar con el Estado de Derecho.
La desolación, la desesperanza y el fastidio que empieza a cundir entre los ecuatorianos no sólo tiene que ver a la falta de trabajo, o a la terrible violencia que se ha desatado, sino a la falta de un verdadero proyecto de país. El Ecuador se parece a un barco a la deriva. Los ecuatorianos queremos que quienes están al frente de los poderes del Estado se sacudan y juntos esbocen un proyecto de país.
Francisco Antonio Llanes Suárez