Fuentes del Metro de Quito aseguraron que revisan en la Fiscalía de Ecuador el proceso investigativo que lleva a cabo su par en España, después de que se conociera el 5 de abril de 2022 que esa autoridad indaga denuncias de un supuesto pago de sobornos para obtener un contrato de asesoría en 2013 para llevar a cabo la obra en la capital.
Su gerente Efraín Bastidas dijo este miércoles 6 de abril de 2022 que el “Metro de Quito aporta a la transparencia de la investigación de Fiscalía de España, sobre un proceso de adjudicación para la gerencia técnica del proyecto que se llevó a cabo hace años atrás”. Así lo manifestó el funcionario durante una entrevista con radio Platinum.
Según un informe publicado el martes por el diario español El Confidencial, la Fiscalía Anticorrupción de España investiga desde hace varios meses una denuncia de sobornos que habría pagado un consorcio español para adjudicarse del contrato de asesoramiento en la construcción del Metro de Quito en el año 2013.
El fiscal encargado de las pesquisas, Luis Rodríguez Sol, señala al consorcio GMQ por los supuestos pagos ilegales. La firma estaría conformada por las empresas Prointec, KV Consultores e incluso señala que estaría involucrada la compañía Bustren.
En ese entonces, Édgar Jácome fue la persona encargada de firmar el contrato el 17 de julio de 2013. El exfuncionario era el delegado del exalcalde de Quito Augusto Barrera.
Por este caso, el Ministerio Público presentó una denuncia, la cual fue admitida por el juez Alejandro Abascal de la Audiencia Nacional (AN). En el señalamiento, el Fiscal acusa a nueve personas, entre las cuales menciona a empresarios.
Habrían usado empresa ficticia para pagos ilegales
Según el diario El Confidencial, una de las compañías que formaban parte de Prointec, la cual era filial de ingeniería de Indra, habría pagado alrededor de USD 1,2 millones a funcionarios ecuatorianos para asegurar el contrato.
Estas coimas se habrían ocultado como pagos a terceras empresas por la prestación de servicios, según las confesiones que efectuaron algunas personas que participaron de manera directa en la negociación.
Los sobornos se habrían cancelado en pagos menores para pasar inadvertidos. Tras un abono inicial superior a los USD 300 000, hubo hasta 24 depósitos posteriores de USD 35 000 cada uno. De acuerdo con la publicación, su destinatario fue uno de los hijos de Gonzalo Alonso Martínez, cónsul honorario de Ecuador en Madrid. El ciudadano es señalado por la supuesta creación de una sociedad ficticia solo para recibir el dinero.
El medio español informa que la gerencia del proyecto se realizó en gran medida en Madrid. El consorcio se adjudicó el contrato por USD 15,3 millones, con una duración de 45 meses, previa una serie de gestiones de consultoría. GMQ se comprometió con el Metro de Quito para la entrega de 40 informes. Después de la firma debía entregarse el 30%, mientras el restante se abonaba con la presentación de cada estudio, USD 384 000 por cada uno.
Proceso de selección del operador en curso
La investigación por supuesta corrupción se conoce cuando la Empresa Metro de Quito busca una firma que se encargue de la operación del nuevo sistema de transporte. El Municipio de Quito tiene previsto firmar un acuerdo con el ganador a finales de 2022 y el seleccionado empezaría a trabajar antes de fin de año.
Este Diario solicitó al Metro de Quito una entrevista para conocer la postura y acciones que tendrían en este caso, sin embargo, hasta las 14:00 de este miércoles 6 de abril señalaron que luego de la revisión del Área Jurídica emitirían un comunicado.
Exalcalde Barrera se pronuncia
El exalcalde Quito, Augusto Barrera, , dijo este miércoles que en las informaciones difundidas se confunden dos procesos. Por una parte, el desarrollo de los estudios generales que hizo el Municipio junto con el Gobierno Nacional de la época y el Ayuntamiento de Madrid, nada tiene que ver con una consultoría para armar la gerencia técnica del Metro.
De ahí que Barrera, explica que se trata de un tema técnico. “La competencia está en la empresa, no es un problema de la Alcaldía ni del Concejo, sino de la gerencia del proyecto y de una comisión técnica. Sobre este aspecto no tengo responsabilidad”.
“Lo que aspiro es que este proceso de investigación se desarrolle con profundidad y que lo que salgan sean conclusiones, la Ley es para eso. Yo no he sido ni llamado ni notificado, me he enterado por la prensa. Aspiro a que haya una investigación adecuada (…). Me sorprende que ocurra en la semana que se lanza el concurso para la operación del Metro de Quito”.