El fin de semana asistí nuevamente, con parte de mi familia, al Centro Cultural Metropolitano, para deleitarme, al cabo de mucho tiempo, con la exposición del excepcional pintor Endara Crow y admirar una vez más su magia (1936-1996).
Aparecen en los cuadros de Endara Crow los maravillosos tejados que son una marca registrada de su arte; los trenes, campanas y peces en el aire; los buses populares; las velas encendidas en las cimas de las montañas, con cientos de mariposas revoloteando a su alrededor y otras ‘sutilezas de manos’ que encantan.
Me llamó la atención las coloridas flores, que no recordaba también las pintaba. Me fue grato comprar el precioso libro ‘La magia de Endara Crow’, para tener a mano cada vez y cuando, su estupendo arte.
Es digna de visitarse la indicada exposición en el Centro Cultural Metropolitano.