Djalal Rafati, el padre de Babak Rafati, el árbitro alemán de 41 años que el sábado intentó suicidarse antes de un partido entre el Colonia y el Maguncia, aseguró este domingo en la prensa que no entiende porque lo hizo y que nunca le habló de depresión.
“Nunca me habló de depresión o de estar quemado. Si lo hubiera hecho habría reaccionado”, dijo Djalal Rafati al periódico Express de Colonia. “Era muy feliz (siendo un árbitro). Tuve que operarme de un ojo hace unos días antes y no puede ir a Colonia, por eso no estaba con él. No puedo entender porque Babak lo hizo”, añadió.
Según informaciones de la agencia deportiva SID, filial de la AFP , el árbitro de origen iraní estaba en estado crítico cuando lo encontraron con las venas cortadas en la bañera de su habitación de hotel en Colonia, pocas horas antes de que empezara el Colonia-Maguncia. Rafati fue nombrado peor árbitro de la liga alemana en tres ocasiones por la revista Kicker y en septiembre pasado fue retirado de la lista de árbitros habilitados para dirigir partidos internacionales.