Me ha causado desazón y estupor, al conocer que fue nombrado como portaestandarte, y capitán de la Selección ecuatoriana, a los Juegos Olímpicos de Londres 2012, al señor César de Césare, nacionalizado argentino ecuatoriano, cuando en verdad había 36 participantes, que obviamente, cualquiera de ellos podrían haber sido designado, para llevar con orgullo nuestra tricolor nacional.
No sé cuales fueron las razones para que los directivos del COE, hayan tomado la decisión, de nombrar ha dicho deportista, que no es ecuatoriano, por más méritos que tenga.
Hacía falta un poco más de sentimiento nacionalista, de amar a nuestra tierra, y a nuestros compatriotas, porque es la esencia pura de nuestra sangre, y de nuestra estirpe, ojalá nuestros deportistas, con amor y pundonor, puedan representar brillantemente a nuestro pequeño país con dignidad y orgullo.