La incertidumbre y la crispación, que se instalaron la tarde del domingo luego del cierre de las votaciones, persisten este día al rojo vivo en Venezuela.
El anuncio que hiciera la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano, la prooficialista Tibisay Lucena, sobre el triunfo de Nicolás Maduro calentó más el ambiente cargado del domingo.
El organismo rector del sufragio informó que el heredero del fallecido presidente Hugo Chávez se impuso en una reñida elección presidencial. El exconductor de autobús del Metro de Caracas y exCanciller logró el 50,66% de los votos (7 505 338 sufragios), mientras que su principal rival, el abogado opositor Henrique Capriles, reunió el 49% (7 270 403).
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A renglón seguido del anuncio, las reacciones de los candidatos del oficialismo y de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) fueron disímiles.
Maduro dedicó la victoria a su mentor y gurú político y festejó con sus partidarios. Capriles, por su lado, no reconoció los resultados y demandó al CNE el reconteo voto a voto. Horas atrás había lanzado un duro mensaje a través de su cuenta de Twitter (@hcapriles). “Alertamos al país y al mundo la intención de querer cambiar la voluntad expresada por el Pueblo!…”.
Este lunes, aunque se ha cuidado de referirse a un fraude, el Gobernador del estado de Miranda, vecino de Caracas, insistió en su demanda de una auditoría del proceso electoral del domingo. “Hasta que no se cuente cada voto, auditoría de todo, hay un Presidente ilegítimo y así lo denunciamos al mundo”, tuiteó.
Y pasadas las 13:30 locales, tenía previsto expresarse en torno a las acciones que la MUD planea iniciar para demandar el reconteo de los votos. La alianza opositora, asimismo, denunció 3 200 incidencias (irregularidades) que pudieron influir en el desarrollo del proceso electoral
La tensión también se avivó más a raíz de una versión divulgada esta mañana por diversos medios en el sentido de que el CNE proclamaría a Maduro como el vencedor de los comicios, a pesar de la impugnación presentada por Capriles y su comando de campaña.
El diario caraqueño El Universal publicó hoy en su página electrónica que el presidente del partido Copei, Roberto Enríquez, hizo un pedido a los rectores (vocales) del organismo rector del sufragio. Solicitó que se suspendiera el acto de proclamación del delfín de Chávez como nuevo inquilino del presidencial Palacio de Miraflores.
En forma paralela, la crispación y la incertidumbre también fueron alimentadas por la serie de denuncias particulares acerca del hallazgo de cajas del CNE con votos a favor del candidato opositor. Los materiales electorales habían sido botados en vías venezolanas, como por ejemplo ocurrió en la Troncal 5 del estado de Barinas; en Puerto Ordaz, en el estado de Bolívar, y en Maracaibo.