La propuesta presidencial de crear una Función del Estado, que maneje la información, enciende las alarmas en la opinión pública.
Desde las esferas académica, periodística y jurídica hay el criterio de que detrás de esa idea hay un afán de “estatizar” el libre flujo de información en el país.
Y que este tipo de propuestas no corresponde a democracias modernas, sino a regímenes que buscan silenciar las voces críticas.
Para José Laso, director de Comunicación de la U. Andina, es un “absurdo” que el Estado pretenda controlar la información.
Desde su óptica, solo países con gobiernos de corte dictatorial han pretendido monopolizar la información desde el Estado.
Sus palabras se refieren a casos como la ex Unión Soviética, donde el Estado y el Partido Comunista controlaban a los medios.
¿Qué países monopolizan desde el Estado la información? Según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), un país ubicado en el cuerno de África es el que más censura a la prensa. Se trata de Eritrea, donde todos los medios son controlados por el Gobierno. “Cada vez que (un periodista) debía escribir una nota, los funcionarios seleccionaban a los entrevistados y determinaban los temas específicos sobre los que debían escribir”, le dijo este año un periodista eritreo al CPJ.
Dentro de la lista de países que más coartan a la prensa figura Corea del Norte, la única dinastía comunista del mundo. Allí todo el contenido informativo local es manejado por la Agencia Central de Noticias de Corea. Además, los transistores y televisiones que utiliza la población norcoreana solo pueden recibir la señal de las estaciones estatales.
Aunque no había detalles de propuesta del Primer Mandatario, la Unión Nacional de Periodista (UNP) la considera como parte de su política para intentar silenciar el trabajo de la prensa.
El último episodio se registró la semana pasada, cuando un juez acogió un recurso de protección planteado por Carondelet y ordenó que diario La Hora rectificase y se disculpase con el Gobierno, por una publicación.
No obstante, Vicente Ordóñez, titular de la UNP, no descarta que la propuesta sea un “globo de ensayo”, para desviar la atención del país sobre casos incómodos al Régimen. Uno de ellos -dice- es el préstamo al argentino Gastón Duzac, concedido por Cofiec, que está bajo la administración del Fideicomiso No Más Impunidad, manejado por Pedro Delgado, el primo del Jefe de Estado.
Aunque José Hernández, director adjunto de diario Hoy, sí está convencido que desde el Ejecutivo hay una visión cuasi monárquica del manejo del país, que implica un retroceso hasta el siglo XVIII. “¿O cómo se denomina un régimen político sin separación de poderes y que, además, hace suyo el derecho de comunicar?”, se preguntó en su análisis de ayer.
Una engorrosa reforma constitucional
La creación de una Función del Estado solo es posible si se reforma a la Constitución del 2008, mentalizada por Alianza País.
Sin embargo, para concretar esa modificación se debe cumplir un trámite largo, que no se resuelve con una consulta popular.
Así lo explica Juan Francisco Guerrero, profesor de derecho constitucional de las universidades Católica y Andina. Advierte que se debe aplicar el artículo. 442 de la Carta Política, que establece un procedimiento especial cuando se trata de cambiar la estructura del Estado. Esa norma señala que la Asamblea debe aprobar una reforma constitucional, tras dos debates, con intervalo de 90 días entre cada uno de ellos. Y luego su texto sea sometido a un referéndum, para su aprobación.
“Es un procedimiento largo y que desgasta. Más si se trata de un tema polémico como la formación de un Poder del Estado que maneje la comunicación”.
El Presidente matiza
Desde Guaranda, en un conversatorio, el Jefe de Estado matizó anoche su propuesta, que la había planteado en su gira en Europa. Explicó que él tiene derecho a expresar una iniciativa. Y que si no es la mejor opción crear una Función del Estado, el país sí puede debatir su hipótesis de que la prensa privada no puede manejar la información.
La lista del CPJ
Según el Comité (CPJ), los 10 países donde hay más censura son: Eritrea, Corea del Norte, Siria, Irán, Guinea Ecuatorial, Uzbekistán, Birmania, Arabia Saudita, Cuba y Bielorrusia.
El Consejo de la Facultad de Periodismo de la U. Nacional de La Plata resolvió dar al Mandatario ecuatoriano el premio Presidente latinoamericano por la comunicación popular.