La quebrada del río Mataderos es la principal fuente de abastecimiento de agua de Macará. Foto: Cortesía Municipio de Macará.
La realización de actividades de minería pone en riesgo la microcuenca y la quebrada del río Mataderos, ubicado en el límite sur del cantón Macará (Loja).
Así lo denunció el Municipio de este cantón a través de un comunicado publicado este miércoles 25 de noviembre del 2020.
Según el enunciado de la Alcaldía, cerca de este afluente se estarían realizando actividades de minería en una fase de exploración.
Esas actividades, agrega el Municipio, vuelven vulnerable al río ante posibles indicios de contaminación. Estas aguas son vitales para el cantón debido que es la principal fuente de recursos hídricos para la captación del agua.
Ante esos sucesos, la Alcaldía indicó que envió un comunicado de alerta al titular del Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables, René Ortiz. El objetivo es recordar a esta Cartera de Estado que esta fuente es parte de un área de conservación municipal.
“Se tiene conocimiento a ciencia cierta que existe una concesión minera a la altura del nacimiento de la quebrada del río Mataderos. Esta concesión se llama Macará Minas”, afirmó Paúl Torres, alcalde subrogante de Macará. “Estamos sumamente preocupados” agregó Torres quien dijo que convocarán a una reunión con autoridades de la provincia y de otras entidades estatales para que se revise este proceso.
Desde este esta fuente se captan cerca de 82,85 litros de agua por segundo para abastecer a las zonas rurales y urbanas del cantón. Para cuidar esta área, el Municipio aprobó una ordenanza para la protección de microcuencas.
“Es nuestro deber, de manera urgente, solicitar, que se reviertan estas actividades que atentan la salud pública, y amenazan con destruir la fuente de agua de la ciudad de Macará”, insistió el Municipio.
En Macará también hay preocupación por la falta de lluvias que afectan el abastecimiento continuo de agua. Por ello, el Municipio trabaja en la adecuación de un nuevo pozo de agua para abastecer del líquido a la población.
“El estiaje ha hecho que el caudal que llega a nuestra planta de agua potable disminuya. Es así que hemos activado un plan de contingencia para suplir en algo la falta de agua”, explicó Robert Guerrero, encargado del Departamento de Manejo Ambiental.