Los vehículos con vidrios polarizados entraban y salían del Centro de Rehabilitación de Santo Domingo.
Un guía aseguró que eran funcionarios de la Dirección Nacional. Ellos habían llegado ayer de Quito tras conocer sobre la muerte de un prisionero.
Se trata de Merlin C., quien tenía un juicio abierto por presunto delito contra la vida. Él, supuestamente sufrió un ataque de asma a las 22:00 del jueves. Fue trasladado a una casa de salud, pero no resistió, señalaron.
Un privado de libertad dijo que no recibió atención médica inmediata. “Él usaba inhaladores y se le habían terminado. No le entregaron nuevos. Acá no hay medicinas para los presos”.
Los dirigentes de los privados de libertad trataron de amotinarse ayer por la mañana, en protesta. Pero la Policía controló la situación. En un principio incluso trascendió que dos guías habían sido retenidos por los presos.
El jefe de la Policía de Santo Domingo, Manuel Pérez, acudió al sitio con 50 uniformados. “Se comprobó que no era cierto lo de los guías y que lo único que querían era hablar con la Directora del Centro para que se mejoren sus condiciones”.
Es la segunda vez que se registra un fallecido en ese centro que, según el Ministerio del Interior, es un ejemplo del país.
El 27 de agosto del 2011 otro prisionero murió en circunstancias que aún se investigan. Sus familiares dijeron que fue golpeado por un guía (detenido).
Ayer, hasta el cierre de esta edición, las autoridades del Centro y los funcionarios de la Dirección Nacional estaban reunidos a puerta cerrada.