Varias calles de Quito que tradicinalmente están llenas de gente los días viernes y sábado por la noche permanecieron vacías el 23 de abril. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Bares y discotecas permanecen cerrados desde el pasado 16 abril, día en que un terremoto azotó a la Costa ecuatoriana. Las autoridades tomaron esa medida para precautelar las vida de los ecuatorianos tras las constantes réplicas que se registran desde aquel 16 de abril.
El Ministerio de Interior fue el encargado de ampliar la suspensión de actividades en establecimientos de diversión durante 72 horas. El anuncio se lo hizo el pasado 20 de abril.
El Acuerdo Ministerial 7052 fue emitido el miércoles 20 de abril, por su titular, José Serrano. El alcalde de Quito Mauricio Rodas hizo eco de aquello al extender hasta el mediodía de este domingo 24 de abril la suspensión de eventos públicos en la capital ecuatoriana.
Según reportes del Instituto Geofísico, un sismo de 5,2 grados se registró el viernes 22, a las 08:26. El jueves hubo dos temblores de 6,1 y 6,0 grados, respectivamente.
Los únicos que abrieron sus puertas esta noche fueron restaurantes y locales de comida rápida. Eso se observó en la avenida Michelena, en el sur de Quito; en la Plaza Foch y en la avenida Eloy Alfaro y Portugal. Esos lugares, precisamente, acogen los fines de semana a decenas de personas que disfrutan de la vida nocturna: bailar, cantar…
Si las réplicas cesan se espera que las actividades se reanuden la siguiente semana, pues tras el terremoto se suspendieron también conciertos y los partidos del Campeonato Nacional de Fútbol.