[[OBJECT]]El jueves de terror se ha vuelto ya una especie de costumbre dentro de los mercados bursátiles del mundo. Ayer, nuevamente las principales bolsas se desplomaron por las perspectivas pesimistas de la Reserva Federal (FED) sobre el estado de la economía americana y por las dificultades que atraviesa la Zona Euro.
“ La FED decepcionó y Europa sigue en crisis. Es una acumulación de malas noticias” , resumió frustrado Dov Adjedj, de la correduría francesa Aurel BGC.
Al término de una reunión de dos días en Washington, la FED anunció que venderá hasta fin de junio de 2012 USD 400 000 millones en bonos del Tesoro para comprar una suma equivalente pero con vencimientos más prolongados, de seis a 30 años, con el objetivo de tratar de hacer bajar las tasas de interés a largo plazo.
“Esta operación era muy esperada, pero no lo era la advertencia muy seria de la FED sobre los riesgos importantes para la reactivación económica”, comentó Jane Foley, analista de Rabobank
Efectivamente, la FED advirtió en su comunicado “una debilidad persistente del mercado laboral, una tasa de desempleo elevada y riesgos importantes para la lenta reactivación de la economía de Estados Unidos”.
Como consecuencia de este anuncio, las bolsas se precipitaron. Y una vez más, los valores bancarios figuraban entre los más afectados debido a su exposición a la crisis de la deuda y a la rebaja de la nota a largo plazo de dos de los principales bancos estadounidenses, Bank of America y Wells Fargo, por la agencia de calificación financiera Moody’s.
En Francia, Societe Generale perdió 9,57%, Credit Agricole 9,49% y BNP Paribas 5,70%, tras los comentarios alarmistas de un dirigente del influyente fondo estadounidense Pimco que estimó que los bancos franceses podrían arrastrar a Europa a una recesión.
Las materias primas y las monedas siguen inestables
El petróleo registró una fuerte baja de más de 6% en Nueva York, en medio de una nueva debacle de los valores bursátiles. En el New York Mercantile Exchange, el barril de “light sweet crude”, referencial para el crudo ecuatoriano, terminó en USD 80,51, una caída de USD 5,41 (6,3%) con respecto al pasado miércoles.
Por su lado, los mercados de materias primas también sufrieron fuertes pérdidas debido al temor de los agentes económicos mundiales a una caída de la demanda europea y china por combustibles, alimentos y metales. Es así como los operadores liquidaron posiciones, enviando algunos mercados a sus mínimos en un año, mientras el dólar subía a máximos en siete meses frente a otras monedas del planeta.
Los inversores continúan sumamente preocupados por el deterioro de la economía mundial. En consecuencia, la moneda única europea tocó mínimos ante dos divisas consideradas refugio en tiempos de incertidumbre económica, al caer por debajo de USD 1,35, su cotización más baja en siete meses, y tocar un mínimo en 10 años frente al yen.