Imagen referencial. Se busca que la industria de organización de eventos sea un ejemplo de sostenibilidad a nivel mundial. Foto: Wikicommons.
¿Sabía que su próximo evento social puede respetar la regla de las tres erres? Reducir, reutilizar y reciclar es ahora la propuesta de varias instituciones que se especializan en la planificación de eventos tales como bautizos, bodas o cocteles empresariales.
Desde hoy, 6 de octubre de 2015, Quito es la sede del Primer Congreso Internacional de Eventos Sostenibles. Hasta este miércoles 7 de octubre, planificadores en bodas, expertos en catering y otros personajes relacionados con estas áreas ofrecerán charlas y talleres con el fin de que la gente involucrada en esta industria aprendan a desarrollar un evento que tenga el menor impacto ambiental posible. Las actividades se realizan en el Centro de Exposiciones Quito.
Marcia Elena Delgado, directora del congreso y representante de Elena Delgado Eventos, comenta que en la actualidad a los clientes se les debe ofrecer un evento social que cumpla con las normas ambientales vigentes. Con ello se quiere que esta industria, en constante crecimiento, sea un ejemplo en materia de sostenibilidad a escala mundial.
¿Cómo hacerlo?
Las reglas del juego son simples. Delgado se sirve de una boda para explicarlas. Uno de los primeros temas a tomar en cuenta es la selección de un espacio sostenible, lo que implica que en sus instalaciones haya el menor uso de luz artificial y la eficiencia en elementos como sus servicios sanitarios.
“Si se puede, es mejor escoger un lugar al aire libre y que la fiesta sea por la mañana para aprovechar la luz del Sol”, explica. Y sobre los baños, “pues estos deberán utilizar la menor cantidad de agua ya que muchas veces uno se encuentra con que están dañados, por lo cual hay uso innecesario del líquido vital”.
Otro elemento a tomar en cuenta es la movilidad de los invitados. Ella recomienda que los sitios no se encuentren muy alejados de los centros urbanos ya que esto implica el uso de automóviles, los cuales generan polución ambiental.
Y en cuanto al catering, su recomendación es que en los menús se elijan alimentos que se produzcan en zonas aledañas al lugar de la boda para así reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que produce la transportación de los mismos. Añade que se debe planificar la reutilización de la comida sobrante para la composta, por ejemplo.
Aunque todo esto suene a una larga tarea, para Delgado es una necesidad en el siglo XXI. “Nuestra generación ha consumido 60 años de recursos del planeta” dice como advertencia de que impera que la organización de eventos también tenga su cuota ambiental.