Abu Bakr al Bagdadi es el ‘autoproclamado’ califa del Estado Islámico (EI) y líder de los yihadistas en Medio Oriente. Captura de pantalla tomada de: pakistantv.tv
A finales de junio del 2014 los líderes musulmanes emitieron el documento titulado “Esta es la promesa de Alá”, donde se fijaron dos hechos trascendentales para el mundo islámico.
La designación del nombre del Estado Islámico (EI), en lugar del Estado Islámico de Iraq y Levante (EIIL) y; por otro lado, el reconocimiento de Abu Bakr al Bagdadi como ‘autoproclamado’ califa y líder de los musulmanes.
El grupo yihadista del EI es conocido por sus despiadadas y brutales prácticas que incluyen decapitaciones, asesinatos en masa y secuestros a minorías religiosas. Esto ha ocasionado la muerte de al menos 1 7000 personas y más de un millón de desplazados, como consecuencia de sus acciones; catalogadas como “terroristas” por el gobierno de EE.UU.
Abu Bakr al Bagdadi, su máximo líder, es un carismático predicador musulmán que ha logrado la expansión del territorio en Medio Oriente; con un amplio margen en el norte de Iraq y Siria. Además, tiene el apoyo incondicional e irrefutable de todos los militantes del EI.
¿QUIÉN ES EL ‘AUTOPROCLAMADO’ CALIFA DEL EI?
Una publicación de la agencia EFE del 2 de julio indica que Abu Bakr al Bagdadi es un hombre ambicioso y despiadado que ha conseguido el ansiado sueño del extremismo islamista, al establecer el Estado Islámico (EI).
Los únicos datos biográficos conocidos de Al Bagdadi apuntan a que nació en el seno de una familia religiosa de Samarra (Iraq) en 1971. Estudió Historia Islámica en la Universidad de Bagdad, donde se doctoró a finales de los años 90 del siglo XX.
Tres particularidades definen la personalidad del nuevo califa. Es un hombre obsesionado por su seguridad, ya que existen escasos registros fotográficos de su rostro. Contrario a otros líderes, como Bin Laden, por ejemplo, el nuevo caudillo es un combatiente que ha colaborado con en el frente. Junto a su ejército, de casi 100 000 combatientes, tomó la ciudad de Mosul, el 10 de junio pasado. Al Bagdadi se inclina por la ejecución de brutales métodos en contra de todos aquellos a los que considera enemigos.
Una publicación de la BBC Mundo del 5 de septiembre, titulada “Siete preguntas para entender qué es Estado Islámico y de dónde surgió”, asegura que su objetivo es “romper con las fronteras de Líbano y Jordania con el fin de “liberar a Palestina”.
¿CÓMO SE CONFORMÓ EL NUEVO CALIFATO?
Antes de consolidarse como líder máximo del EI, Al Bagdadi formó parte de uno de los muchos grupos armados en Iraq, surgidos contra la ocupación de EE.UU. en 2003.
Allí escalo posiciones hasta que, en 2010, se convirtió en líder de Al Qaeda en el territorio iraquí. Fue el tercero tras las muertes de Abu Musab al Zarqaui, considerado su mentor por algunos, y Abu Omar al Bagdadi.
Fue prisionero durante cuatro años en la prisión de EE.UU. en Iraq, conocida como ‘Camp Bucca’. En ese lugar se profundizó su afán de lucha junto al grupo terrorista Al Qaeda.
El diario ABC de España destaca, en una noticia del martes 9 de septiembre, la radicalización de Al Bagdadi como un punto de inflexión en la vida político religiosa del ahora califa del EI. Pese a su descendencia sufí -rama del islam de talante tolerante y espiritual-, sus estudios de teología musulmana en Bagdag fueron cruciales en la formación de un pensamiento radical. Su linaje es asociado a la descendencia del profeta Mahoma.
Estos hechos, sumados al documento emitido en junio pasado por el nuevo Estado Islámico dan forma al califato de Abu Bakr al Bagdadi, el primero desde el fin del imperio otomano en 1924.
EL CRECIMIENTO DEL EI EN MEDIO ORIENTE
Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, el EI cuenta con un amplio territorio en el norte de Iraq y Siria. Se estima que, entre el Estado Islámico y sus aliados, controlan al menos 40 000 kilómetros cuadrados de esa zona. Como contingente se presume que la organización cuenta con 100 000 yihadistas fieles a Al Bagdadi.
El armamento es otro de los pilares. Los combatientes del EI poseen armamento sofisticado y artillería pesada; además de ametralladoras y lanzacohetes. En las incursiones a los territorios de Siria e Iraq, la organización musulmana capturó tanques de guerra y vehículos blindados. Las armas arrebatadas son de procedencia estadounidense.
Según la BBC, el EI es uno de los grupos insurgentes más ricos del mundo. Un reporte económico de la organización reporto un patrimonio en efectivo de USD 2 000 millones. El apoyo financiera, en principio, llegaba de personas naturales de los países árabes. Luego se volvió autónoma gracias a la venta de petróleo y gas de los campos que administra. Los fondos también llegan de actividades ilícitas como secuestro, contrabando y extorsión.