Los cooperantes y médicos transfieren sacerdote católico Miguel Pajares, quien contrajo el mortal virus del Ébola desde la base aérea de Torrejón de Madrid al hospital Carlos III el 7 de agosto del 2014. Foto: AFP
Frente a la declaratoria mundial de emergencia por el ébola, hecha por la Organización Mundial de la Salud, las autoridades sanitarias del Ecuador adoptan medidas de prevención. A través de un comunicado anunciaron que en los puntos de entrada del país se hará una búsqueda de personas que hayan tenido contacto con el virus, en los 21 días anteriores a la aparición del síntoma.
Esto si se detectara un caso, pues hasta este 11 de agosto del 2014, no había ninguno registrado en suelo ecuatoriano. Además, el Instituto Nacional de Salud Pública e Investigación–INSPI está preparado para realizar análisis de laboratorio si alguna persona presenta síntomas.
El brote de ébola comenzó en Guinea en diciembre del 2013. Hasta ahora se conoce de su presencia en Guinea, Liberia, Nigeria y Sierra Leona, países del África Occidental. Estos países han reportado 1 711 casos (1 070 confirmados, 436 probables y 205 posibles), 932 de ellos mortales, según la OMS.
Por eso el Ministerio de Salud del Ecuador también anunció que se ha levantado alertas en aeropuertos y centros especializados para dar tratamiento inmediato a las personas que puedan llegar con el virus. Y de forma paralela se dará información específica a los ecuatorianos que piensen viajar en los próximos días a los países donde se ha registrado el brote.
Los síntomas más comunes que presentan las personas infectadas con el virus ébola: fiebre de inicio repentino, debilidad intensa, dolor muscular, dolor de cabeza y dolor de garganta, seguidos por vómitos, diarrea, erupción cutánea, deterioro de la función renal y hepática, y en una fase avanzada, hemorragias tanto internas como externas.