Redacción Guayaquil
El Conartel, una entidad estatal, decidió que un canal ecuatoriano cambie el horario de transmisión de la serie ‘Los Simpson’, el argumento fue que pudiera generar violencia entre los niños, ya que se proyectaba en un horario infantil, ¿cuál es su opinión?
No vengo a hablar de política ni a meterme en cuestiones que no tienen que ver con mi trabajo, pero como artista estoy obligado a comunicar, a dar mensajes. Efectivamente no es un show infantil, no es Winnie Poo ni cualquier dibujo animado infantil. ‘Los Simpson’ tiene temáticas fuertes, son críticas sociales muy agrias, pero a la sociedad norteamericana.
¿Es decir…?
Para nosotros, como latinoamericanos, muchas de sus situaciones no nos afectan. Aquí no son familiares. Argumentar que los contenidos de ese show de televisión no son aptos para los valores de la familia, pues depende de la educación que se tiene en casa. La televisión no es la que educa, quien lo hace son los padres.
Pero muy pocos padres ven televisión con sus hijos.
Es muy loable que un padre se siente, vea televisión y le explique al hijo lo que ven. Si se deja solo al hijo frente a la televisión cualquier programa es malo, el que sea. En cuanto a la censura creo que en casi toda Latinoamérica vivimos en Estados democráticos y de libertad de expresión.
Usted está vinculado a la serie algunos años, ¿se puede decir que incide en la formación de los niños y niñas?
No estoy muy familiarizado con las políticas internas del Ecuador, pero Latinoamérica es una sola. Tenemos los mismos usos, las mismas cuestiones morales y educativas. No creo que ‘Los Simpson’ afecte a la moral, a la educación de la familia y mucho menos que presente situaciones violentas. Vemos más violencia en los noticiarios o al salir de nuestras casas. No podemos cerrarles los ojos, impedir que salgan o que prendan la televisión, lo que podemos hacer es orientarlos
¿Y en ‘Los Simpson’?
Que se le explique al hijo que lo que pasa en ‘Los Simpson’ es mera ficción, que nada tiene que ver con nuestra realidad. Y se puede tomar una buena lección de ‘Los Simpson’: se puede aprender lo que no se debe de hacer.
El organismo estatal revirtió esa decisión.
Me congratulo que lo haya hecho. Lo oí en los noticieros, también es bueno que se forme una comisión con gente que sabe.