Bogotá, DPA
Un herido dejó hoy la explosión de una bomba en un club social de la ciudad colombiana de Neiva (suroeste), en un ataque atribuido por las autoridades locales a la guerrilla de las FARC.
La bomba fue accionada al frente del club Los Andaquíes y causó heridas leves al vigilante de la edificación, así como daños materiales menores.
Según fuentes policiales, la bomba fue un señuelo para atacar a las autoridades, pues en el lugar se encontró una poderosa carga explosiva que pudo ser activada de forma controlada.
El comandante de la Policía en el departamento de Huila, coronel José María Lozada, dijo que la bomba dirigida contra la fuerza pública había sido fabricada con 100 kilos del explosivo amonal.
Lozada dijo que el objetivo de los miembros de la columna “Teófilo Forero” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) era atraer la atención de las autoridades con la primera explosión, para luego activar la carga mayor.
El jefe policial dijo que sus hombres no cayeron en la trampa, pues por la experiencia de casos similares lo primero que hicieron fue inspeccionar el lugar con artificieros para descartar el peligro de una segunda explosión.
Un caso parecido ocurrió el pasado 14 de noviembre, cuando un petardo de regular poder explotó al frente de la nueva sede del Concejo Municipal de Neiva, en un ataque que dejó tres heridos.
La Policía desactivó minutos después un coche bomba que estaba estacionado a pocos metros del lugar con 50 kilos del explosivo amatol, una mezcla de nitrato de amonio y pentolita.
El director de la Policía colombiana, general Óscar Naranjo, dijo que se entregará una recompensa de 50 millones de pesos (unos 24.800 dólares) a quien entregue informaciones que permitan capturar a los autores del ataque. Naranjo dijo que unos 200 policías serán enviados a Neiva para reforzar la seguridad en vista de los recientes atentados.