En el octavo piso de la Corte Nacional de Justicia se desarrolló ayer la audiencia preparatoria de juicio contra 11 militares y 2 policías en servicio pasivo. Ellos son procesados por los presuntos delitos de lesa humanidad como tortura, desaparición forzada y violencia sexual, cometidos contra tres integrantes del desaparecido grupo Alfaro Vive Carajo (AVC).
El 10 de noviembre de 1985, los tres integrantes de AVC, Luis Vaca, Susana Cajas y Javier Jarrín, fueron detenidos en Esmeraldas por militares, quienes les pidieron sus identificaciones. Luego, sin ninguna razón u orden judicial, los llevaron al cuartel “Batallón Montúfar” en donde, según la Fiscalía, les torturaron.
En las afueras del edificio, los familiares, amigos y otros militares retirados (r) gritaban consignas a favor de los exuniformados y señalaban que estos son inocentes de los cargos que les atribuye la Fiscalía.
Durante la diligencia, los abogados de los militares y policías en servicio pasivo manifestaron que no se respetó el debido proceso. También, pidieron la nulidad del caso bajo el argumento de que los delitos de lesa humanidad no estaban tipificados en la ley de 1985.
Marcelo Dueñas, defensor del general Édgar Vaca (r), excomandante de la Policía Nacional, manifestó que los delitos de lesa humanidad “recién entran en vigencia (en Ecuador) en el 2002 y no pueden regresarse a 1985″.
De su lado, el fiscal general Galo Chiriboga sostuvo que en este caso no hubo vicios de procedimiento y procedibilidad como “alegaron los abogados de la defensa”. Asimismo, indicó que desde la Constitución de 1945 el país se acoge a las normas del derecho internacional. Una de ellas es el Estatuto de Nuremberg que hace referencia a los delitos de lesa humanidad.
La diligencia se suspendió ayer en la tarde y continúa hoy.