El Municipio de Guayaquil asume por primera vez la organización del evento. La cita de cuatro días inicia hoy 12 de agosto en el Centro de Convenciones. Foto: Mario Faustos/ EL COMERCIO.
El Municipio de Guayaquil hace una nueva propuesta de Feria Internacional del Libro (FIL), que pone énfasis al componente infanto-juvenil y que en lo literario resalta la presencia de nueve escritores internacionales.
Los novelistas Alonso Cueto (Perú), Laura Piñeiro (Argentina), Piedad Bonett y Jorge Franco (Colombia), junto a Leila Guerriero, periodista y escritora argentina, hacen parte del cartel del evento que inicia hoy 12 de agosto y se extenderá hasta el próximo sábado 15 de agosto en el Centro de Convenciones.
El objetivo, según Cecilia Ansaldo, directora de la Comisión de Contenidos de la FIL, es institucionalizar una cita anual, de “organización permanente y sistemática”, que le permita a la ciudad contar con una feria estable. Por eso es tan importante esta primera experiencia en la que la Municipalidad
–que antes apoyó económicamente siete ediciones de la Expolibro– asume la organización de su propia feria a través de la Empresa Pública Municipal de Turismo, con la colaboración de Expoplaza.
La Feria Internacional del Libro 2015 Guayaquil es mi destino para leer y crecer abre sus puertas este miércoles, de 10:00 a 21:00. La inauguración oficial se realiza a las 12:00. La sede está lejos de ser la única novedad. Esta vez los visitantes tendrán que pagar USD 1 por el ingreso al recinto.
El cobro de la entrada responde a una estrategia de regulación de la asistencia de un público en “realidad interesado” en la oferta del evento, dice Andrea Blanco, gerente comercial de la FIL. Esperan cerca de 30 000 asistentes, pero entre el 40 y el 50 por ciento de esa cifra corresponde a estudiantes de escuelas y colegios, que ingresarán de forma gratuita.
El aspecto comercial es otro de los ejes de la cita que impulsa días de descuentos y ofertas especiales a pesar de la “falta de políticas favorables al libro”, que según Ansaldo permitirían “armonizar” ese componente.
La feria ocupa 5 000 metros cuadrados en el piso alto de la parte posterior del Centro de Convenciones. En los salones Vicente Rocafuerte y Alfredo Baquerizo se ubican más de 35 estands entre librerías, editoriales, fondos bibliográficos de universidades y de instituciones culturales, o autores que comercializan sus títulos.
El estand de Mr. Books, con 60 metros cuadrados, uno de los más grandes, le dará la bienvenida al público en el hall de ingreso a los salones donde se ha reservado un espacio para actividades lúdicas de niños y jóvenes. La propia FIL habilitó un estand donde comercializarán títulos de las librerías quiteñas Rayuela y Tolstói.
Frente a las críticas que levantó en su momento la Expolibro, “se ha cuidado mucho que los expositores tengan relación con el ámbito de la lectura y la cadena del libro”, dice Blanco.
La cita también será sede del IV Festival de Micronarrativa Ciudad Mínima, organizado por el espacio cultural Palabra.lab. Entre los invitados internacionales constan el escritor y teórico Raúl Brasca (Argentina) y Patricia Esteban (España), que mezcla en sus textos fantasía y horror. Ellos ofrecerán talleres de microcuento, presentarán sus libros y participarán en un conversatorio sobre minificción.
Según Adelaida Jaramillo, directora de Palabra.lab, el objetivo es acercar a los jóvenes a la lectura con textos que no necesariamente impliquen “el compromiso” de embarcarse, por ejemplo, en una novela. También pretende que el público distinga las cualidades y fronteras del microcuento y posicionar al Ecuador en el mapa de la micronarrativa hispanoamericana.
Entre los invitados internacionales a la FIL también se encuentra el periodista argentino Rodrigo Fresán, y la catedrática chilena María José Navia. Los autores participarán en conversatorios individuales y mesas temáticas a partir de las 18:00, todos los días. El cronograma puede ser consultado en el sitio web del evento.