Los periodistas a la espera de que Chiriboga salga de la Unidad de Flagrancia. Foto: El Comercio
Luis Chiriboga, implicado en el escándalo FIFAgate, pasó un día más de lo esperado en los calabozos de la Unidad de Flagrancia. Él y dos directivos más de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) fueron sentenciados a prisión preventiva como medida cautelar.
Chiriboga y Francisco Acosta salieron de la Unidad de Flagrancia, donde estuvieron retenidos desde el viernes 4 de diciembre, una hora después de que empezara la fecha 21 del Campeonato Nacional, en los estadios Atahualpa, Rumiñahui y Gonzalo Pozo.
Según reportó uno de los policías de la Fiscalía, un patrullero transportó a las 13:00 de ayer a los detenidos hasta la vivienda de Chiriboga, ubicada en una urbanización al noroccidente de Quito.
Sin embargo, Juan Machuca, uno de los abogados de Chiriboga, Acosta y Vinicio Luna, aseveró que cada uno salió de manera separada.
Luna fue trasladado el sábado a la Cárcel 4, donde ya estuvo retenido en el 2006, cuando fue acusado por tráfico ilegal de personas. Mientras que Acosta cumplirá su sentencia en Guayaquil, donde está su residencia.
Machuca no precisó la hora en la que el Secretario de la FEF fue transportado al aeropuerto Mariscal Sucre.
“Las formalidades se cumplieron. El ingeniero Chiriboga ya está en su domicilio. En el mismo proceso está Acosta”, dijo Machuca.
El abogado aclaró que la demora de la salida de los detenidos de las celdas de Flagrancia se debió a los trámites de ley para garantizar la seguridad de los detenidos.
“Había que hacer un peritaje de los domicilios a donde se los trasladó y presentar algunos oficios a la Policía”, justificó Machuca.
Chiriboga y Acosta tendrán custodia permanente de la Policía en los exteriores de sus domicilios hasta que los jueces terminen la instrucción fiscal, que tendrá una duración de 90 días. Posterior a esto, la Fiscalía emitirá su dictamen en contra de los procesados.
Los tres dirigentes de la FEF están implicados en actos de corrupción en la Conmebol y de la FIFA y son acusados de lavado de activos, también por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La jueza Diana Albán y la fiscal Diana Salazar, de la Unidad de Lavados de Activos, ordenaron la detención preventiva. Con esta medida buscan garantizar la presencia de los procesados en los 90 días que durará la instrucción fiscal.
Chiriboga y Acosta se acogieron a la prisión domiciliaria, ya que ambos superan los 65 años de edad.
Además, las cuentas bancarias de los tres directivos fueron congeladas desde el viernes, fecha en la que brindaron sus declaraciones.
Según el informe presentado por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos y el FBI, Chiriboga lideraba un grupo de dirigentes de la Conmebol llamado ‘El Grupo de los seis’, que recibía sobornos por los acuerdos de los derechos de televisión y comercialización de las copas América, Libertadores y Sudamericana.