Miembros del movimiento Unidad Popular, protestaron en los exteriores del CNE, por la inconsistencias presentadas en el padrón electoral para las elecciones presidenciales del 19 de febrero. Foto: EL COMERCIO
Miembros del movimiento Unidad Popular expresaron su rechazo “frente a la manipulación” del proceso electoral este jueves 2 de febrero del 2017, en las afueras del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Alrededor de una veintena de personas llegó al edificio Matriz del CNE, en el norte de Quito, con banderas de Unidad Popular, liderados por la candidata por Pichincha Natasha Rojas. Ahí instalaron, frente a la puerta principal, una mesa que simulaba una junta receptora del voto.
En la urna etiquetada como Cementerio de San Diego, unos jóvenes disfrazados de “muertos vivientes” hacían fila para sufragar, ante otra persona disfrazada de la parca (muerte).
Miembros del movimiento Unidad Popular, protestaron en los exteriores del CNE, por la inconsistencias presentadas en el padrón electoral para las elecciones presidenciales del 19 de febrero. Foto: EL COMERCIO
Rojas denunció que no se han tomado en cuenta las denuncias de los distintos grupos de la sociedad civil y de los actores políticos sobre el presunto exceso de votantes en el padrón electoral, por lo que exigió que se respete “la memoria de nuestros muertos” y de los electores.
Esto por las denuncias sobre los ciudadanos fallecidos que aún constan en el registro electoral. Sin embargo, las autoridades del CNE y del Registro Civil han respondido en varias ocasiones a estos reclamos y descartan que quienes hayan fallecido hasta el día de las elecciones y consten en el padrón vayan a votar.
Miembros del movimiento Unidad Popular, protestaron en los exteriores del CNE, por la inconsistencias presentadas en el padrón electoral para las elecciones presidenciales del 19 de febrero. Foto: EL COMERCIO
Jorge Troya, director del Registro Civil, dijo el 31 de enero pasado, que la entidad no puede registrar la muerte de ningún ciudadano de oficio, que para ello se requiere la solicitud de sus familiares y los documentos legales respectivos. De todas formas, confirmó que desde el momento de cerrar la base de datos para elaborar el padrón, el 15 de septiembre pasado, han fallecido alrededor de 18 000 personas, quienes sí constarán en la lista.
El presidente del CNE, Juan Pablo Pozo, indicó ese mismo día que esta es una “respuesta institucional absolutamente clara”. Y que las denuncias en contra del padrón son “absolutamente antitécnicas y absolutamente políticas”. Por lo que invitó a los denunciantes a que “vengan y vean cómo se construyó el padrón”. Además confirmó que hasta ese día no se había presentado ninguna denuncia oficial, con documentos de respaldo, ante el Consejo y las 24 Delegaciones Provinciales.