Una ballena jorobada fue rescatada por la Armada chilena en la Patagonia. El cetáceo estaba atrapado en una red de pesca. Foto: Armada de Chile
Los varamientos de fauna marina en Chile se quintuplicaron en los últimos siete años debido al cambio climático y a la captura incidental de especies no deseadas en las redes durante faenas pesqueras.
Las estadísticas del gubernamental Servicio Nacional de Pesca, Sernapesca, informan que el año 2016 los ejemplares que llegaron al sector costero fueron 1 079 y en el último septenio vararon 4 188 ejemplares.
El 37% fueron lobos marinos, otro 37% pingüinos, un 19% cetáceos y un 7% tortugas marinas, nutrias y focas. En la austral región de Aysén, en 2015 vararon 334 ballenas Sei y el año pasado, 124 delfines calderón.
Mauricio Ulloa, jefe nacional de la unidad de rescate, rehabilitación y conservación de Sernapesca, declaró al diario El Mercurio que en el caso de las ballenas Sei, se detectó en diez ejemplares la presencia de toxina amnésica y paralizante de marea roja.
Según el experto, esto ratifica que las alteraciones en las condiciones oceanográficas atribuibles al cambio climático surgen como una de las causas del aumento del fenómeno, junto a los incidentes de la actividad pesquera.
“La intensificación del fenómeno del Niño puede estar afectando la productividad de los océanos y aumentando la cantidad de microalgas nocivas en ciertas épocas del año, intoxicando a los animales“, aseveró Ulloa. Agregó que el aumento de la temperatura del mar obliga a los ejemplares adultos a internarse en el océano y abandonar a sus crías.