Imagen de las ‘novatadas’ en las universidades de Holanda, tomada de la cuenta de Twitter @rug400
Holanda ha decidido tomar medidas contra las novatadas en la Universidad, después de que un estudiante de primer año sufriera un edema cerebral tras una fiesta de iniciación, un grave caso que ha puesto en tela de juicio a las asociaciones de estudiantes, salpicadas en los últimos meses por varios escándalos.
La apertura de una investigación por la fiscalía general holandesa se debe a “la gravedad del incidente y al impacto social” causado por un caso que ocupó durante días páginas enteras en los medios holandeses, explicaron a Efe fuentes del ministerio público.
Los hechos ocurrieron en agosto pasado durante una ceremonia de iniciación de la asociación de estudiantes Vindicat, en Groningen.
Habitualmente, los estudiantes de primer año sufren novatadas humillantes antes de ser aceptados, pero en esta ocasión, la broma fue demasiado lejos. “Aparentemente, alguien estuvo de pie sobre la cabeza de la víctima causándole serias heridas”, indicaron fuentes de la fiscalía.
La investigación penal se ha puesto en marcha a pesar de que, por ahora, ni el joven ni sus padres han denunciado los hechos.
Se desconoce aún si los daños sufridos por el alumno serán irreversibles.
La asociación de estudiantes Vindicat declinó pronunciarse sobre el escándalo en conversación telefónica con Efe, remitiéndose a un comunicado en el que asegura que “colaborará completamente con la fiscalía“.
No es la primera vez que esta asociación está en el ojo del huracán. Varios de sus miembros protagonizaron otro incidente el pasado septiembre, al hacer circular por internet una
polémica lista con 22 estudiantes de primer año en la que, según el medio RTV Noord, se daban el nombre completo de las chicas, su número de teléfono, una fotografía, la dirección de su casa y una puntuación en función de “cómo de buenas eran en la cama”.
Algunas de ellas se vieron obligadas a deshacerse de sus líneas telefónicas por las continuas llamadas de acoso que recibieron.
Vindicat anunció entonces una investigación interna que identificó y expulsó a 13 de sus miembros, todos ellos hombres.
Pero estas medidas no han sido suficientes para la Universidad y el Municipio de Groningen, que han reclamado la prohibición de las novatadas por ley.
La polémica no solo se limita a la provincia de Groningen: en Amsterdam, tres estudiantes terminaron en el hospital por otra novatada hace unas semanas.
Uno de ellos estuvo ingresado tres semanas por una
infección intestinal, otro sufrió una neumonía grave y el tercero tuvo un esguince de tobillo.
Según publicó la web de la televisión pública NOS, los jóvenes tuvieron que nadar en un canal, arrastrarse por un bosque y dormir entre residuos durante su ritual de iniciación. Todos estos escándalos han tenido una segunda consecuencia: el Centro Holandés de Patrimonio Intangible, que anunció en agosto la inclusión de las asociaciones de estudiantes en su lista de patrimonio cultural inmaterial, ha aplazado su decisión.
En su momento, la inclusión se justificó porque “la pertenencia a una asociación es para muchos estudiantes parte de su identidad” y se citaba la importancia que juega la “cohesión social” entre sus miembros, según recogía la web del centro. “No podemos poner en nuestro inventario algo que está prohibido por ley o es sexista”, explicó a Efe el portavoz del centro que coordina la lista,
Albert van der Zeijden.
La solicitud la firmaba una organización paraguas que agrupa a
48 asociaciones de estudiantes, con a más de
40 000 afiliados.
Ahora tendrán otra oportunidad para pedir su inclusión en el inventario, pero antes deberán demostrar que han tomando cartas en el asunto. “Queremos hablar con ellos y ver cómo lo van a manejar”, especificó Zeijden, que calificó de “problema serio” los incidentes de los últimos meses.
“Nos tomaremos nuestro tiempo para ver cómo afrontamos esto”, aclaró el portavoz, que calculó en “dos o tres meses” el tiempo mínimo que las asociaciones necesitarán para volver a entregar la solicitud.