Las nuevas guías estadounidenses sobre el tratamiento de la tuberculosis (TB) disminuyen drásticamente la cantidad de tiempo necesaria para tratar la infección, de nueve a tres meses.
Las recomendaciones se basan en ensayos clínicos que demuestran que el tratamiento de una vez por semana con los fármacos contra la TB rifapentina e isoniazida, tomados bajo supervisión de un trabajador médico, funcionan tan bien como nueve meses de terapia diaria completada por los pacientes por su cuenta.
El régimen supervisado, que asegura que las personas tomen correctamente su medicación, disminuye la cantidad de dosis requeridas de un total de 270 administradas una vez al día, a 12 suministradas una vez por semana, indicaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por su sigla en inglés).
“Este régimen tiene el potencial de cambiar las reglas del juego en Estados Unidos cuando se trata de combatir la TB”, expresó el director de los CDC, Thomas Frieden, en un comunicado. “Nos da una opción nueva y efectiva que reducirá en dos tercios -de nueve meses a tres- la extensión de tiempo por la que algunos necesitan tomar la medicación para evitar que la infección latente de TB avance a enfermedad activa”, explicó.
En la TB latente, una persona puede estar infectada con la bacteria de la tuberculosis pero no tener síntomas ni transmitirla a otros. Si la condición se activa, la persona enferma y puede expandir la bacteria a otros. Las personas con sistemas inmunes comprometidos son quienes más riesgo corren a desarrollar infecciones activas con TB.
Muchos con la enfermedad latente nunca comienzan los nueve meses de tratamiento y, entre quienes lo hacen, casi nadie lo completa. El número de casos de TB activa en Estados Unidos cayó a un mínimo histórico de 11 182 en el 2010.
Pero alrededor del 4 por ciento de la población estadounidense, es decir unos 11 millones de personas, tienen infecciones latentes. La TB sigue afectando de manera desproporcionada en Estados Unidos a las personas de color y a los extranjeros que viven en el país.