La lluvia puede ser recolectada y usada para lavar autos, regar el huerto o el jardín y para realizar labores de limpieza casera. Foto: Archivo EL COMERCIO
De acuerdo con las estadísticas municipales, durante el verano el consumo del agua en Quito aumenta en un 20%, lo que disminuye el caudal y provoca el desabastecimiento en ciertos sectores.
Por ello, el ambientalista Miguel Carrillo indica que además de los consejos básicos que se da para que la gente contribuya con el ahorro de agua potable, también se puede reciclar el agua lluvia.
Se debe recoger el líquido mediante canales que lleven el agua a un depósito localizado en el exterior de las casas. Ahí se captura, filtra y almacena. Las canaletas pueden ser de bambú, si se tiene disponibles.
Este material puede durar hasta cinco años. Para evitar que sean dañados por hongos o insectos se puede hacer un proceso de curación artesanal. Los tallos, luego de cortarlos se exponen a fuego lento, evitando que se quemen. Así se reduce el porcentaje de humedad.
Carrillo vive en el valle de Tumbaco, él está instalando unos canales hechos con bambú para aprovechar las lluvias que caen en ese sector. Indica que una de estas instalaciones caseras tardan cerca de una mañana en ser colocadas.
El primer paso es elegir el lugar para asentar el depósito o los depósitos. Lo normal es colocarlo debajo de un desagüe procedente del tejado o la terraza, si es posible orientado hacia el norte para que no se caliente con el sol.
Además, hay que fijarlo bien sobre una superficie plana. Por ejemplo, sobre un par de bloques de hormigón.
Una de las consideraciones que se debe tener es que para recoger menos de 4 000 litros, el material de los depósitos o cisternas debe ser de polietileno y opaco. Esto es importante porque así se inhibe el crecimiento de algas.
El recipiente que usará Carrillo lo consiguió en una fabrica de productos alimenticios. “La idea es rehusar las cosas. En este caso para recoger y aprovechar el agua”.
Es importante que el agua almacenada se mantenga limpia. Para ello se coloca una rejilla metálica en la parte alta del bajante, en el tejado, para que retenga las hojas, y un filtro en la entrada del depósito.
El líquido queda libre de impurezas y si bien no es apto para beber, con ella se podrá limpiar los pisos, bañarse, regar el jardín o lavar el automóvil.
Un informe de la empresa Pintulac indica que los ecuatorianos gastan en promedio 2 000 litros de agua al mes en lavar los vehículos.
La ingeniera ambiental Lourdes Carranco agrega que el desperdicio y mala utilización de agua a escala mundial se ha convertido en uno de los problemas que la humanidad deberá afrontar cuando las fuentes de agua dulce empiecen a escasear.
“Es usual ver a los ecuatorianos utilizar las mangueras y dejarlas abiertas por cerca de 30 minutos, en ese tiempo se han desperdiciado 500 litros de agua”, indica la experta.
Es decir, si una persona lava su vehículo una vez a la semana está desperdiciando 2 000 litros de agua mensuales.
Estas cifras alarman a la profesora universitaria Andrea Peralta. Ella indica que en la actualidad los arquitectos diseñan casas ‘inteligentes’ y sustentables que proporcionan un ahorro del 50% en las planillas de ese servicio.
Ella vive en una de esas construcciones. Ahí se implementaron dispositivos de ahorro en la grifería de la casa para reducir el consumo de agua. Peralta agrega que para poder captar el agua que cae del cielo es necesario que las superficies expuestas a la precipitación pluvial permitan su escurrimiento del agua.
NO OLVIDE
Una ducha puede utilizar más agua que una bañera. Lo ideal es que se utilice una ducha normal y no a presión y el tiempo recomendable es de cinco minutos.
Hay que utilizar todo el espacio en su lavadora cuando la encienda, así se requerirán menos ciclos por semana y menos agua.
Las boquillas ajustables en los grifos reducen el flujo del agua. Estas se venden en cualquier ferretería. Son ideales para los lavabos de las cocinas y también para los del baño.
Hay que cerrar el grifo de agua cuando una persona se cepilla los dientes. Es preferible recoger el agua en un vaso. Para lavar las frutas o los vegetales use un recipiente y ahorrará