Los niños de Nepal cuyas madres recibieron suplementos de hierro y ácido fólico en el embarazo resultaron más inteligentes, más organizados y con mejores habilidades motrices que los hijos de mamás que no tomaron.
Los investigadores de EE.UU. dijeron que asegurar a las mujeres embarazadas este cuidado prenatal básico podría tener un gran impacto en el futuro educativo de los niños que viven en comunidades pobres.
“El hierro es esencial para el desarrollo del sistema nervioso central”, dijo Parul Christian, experta de la Universidad Johns Hopkins, cuyo estudio se publicó en Journal of the American Medical Association.
La deficiencia de hierro es el trastorno nutricional más común y extendido en el mundo, con 2 000 millones de afectados, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Cuando se sufre a edad temprana, esta deficiencia puede interferir con el desarrollo nervioso, bioquímico y metabólico, afectando la capacidad intelectual y la motricidad fina.
El equipo de Christian estudió a 676 niños en edad escolar, cuyas madres participaron en el estudio y se concluyó que la suplementación con hierro y ácido fólico prenatal tiene un impacto importante sobre el nivel intelectual y la habilidad motriz y escolar de los hijos.