La obesidad es uno de los problemas que afectan a Ecuador y que ha aumentado en los últimos años. Foto: Cuenta de Flickr de Tony Alter
Las tasa de malnutrición y el sobrepeso siguen creciendo en casi todas las regiones del mundo y Ecuador no es la excepción. Tras las sorprendes cifras divulgadas en el Informe de la Nutrición Mundial -12 personas cuenta con diabetes en el mundo y cerca de 2 000 millones son obesos o presentan sobrepeso- especialistas y padres de familia vuelven a hablar de esas dos enfermedades.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (2011-2013), uno de cada cuatro niños (menores de cinco años) padece de desnutrición crónica, problema que se acentúa en las niñas. En ese grupo de edad, por primera vez se estimó la prevalencia del sobrepeso y se encontró que de cada 100 niños, el 8,6% ya tienen un cuadro de sobrepeso y obesidad.
En la población escolar de 5 a 11 años, en cambio, las prevalencias de retardo en talla (desnutrición crónica) están alrededor del 15%, mientras que el sobrepeso llega al 32%. Con relación a los adolescentes (12 a 19 años), en quienes persiste el retado en talla, la obesidad rodea el 26%, mientras que en los adultos el 63% tienen problemas de sobrepeso.
Haciendo eco de esos datos, el Imperial College de Londres, Reino Unido, aseguró que en las últimas cuatro décadas “hemos pasado de vivir en un mundo en el que el número de personas de bajo peso doblaba al de los obesos, a uno en el que hay más obesos que personas con delgadez extrema”.
De acuerdo con datos publicados por la revista científica The Lancet, en el 2014, los países con más hombres obesos son China, Estados Unidos, Brasil, Rusia, India y México; mientras que el mayor número de mujeres obesas se concentra en China, Estados Unidos, India, Rusia, Brasil y México.
Los datos indican que, en 40 años, la cifra mundial de obesos se incrementó de 105 millones de personas, en 1975, a 641 millones en el 2014.
¿Por qué sucede aquello? La nutricionista Andrea Borja cuenta que tanto la desnutrición como el sobrepeso aparecen por un desbalance en la alimentación. A eso se suma, según Jeanette Heredia, nutrióloga, el día a día tan ajetreado que viven las personas, sobre todo, aquellas que viven en las grandes ciudades.
“Antes comíamos en casa. La abuelita o mamá preparaba la sopa y el plato fuerte”. Ese plato fuerte contenía leguminosas, carne de res, pescado, habas, choclo… En la actualidad una hamburguesa puede considerarse un plato fuerte. “Los chicos salen del colegio y lo primero que piden es comida rápida”.