La Junín arma su propio circuito cultural

La calle Junín, ubicada en el barrio San Marcos, es uno de los espacios más tradicionales del Centro.

La calle Junín, ubicada en el barrio San Marcos, es uno de los espacios más tradicionales del Centro.

La calle Junín, ubicada en el barrio San Marcos, es uno de los espacios más tradicionales del Centro. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO

La calle Junín, en el barrio San Marcos, es un espacio que, en los últimos meses, se ha reactivado gracias a una nueva propuesta cultural. El Comité de Emprendedores de San Marcos creó, desde febrero, las Quincenas Culturales: un proyecto que ha reunido a los vecinos del barrio involucrados con en el mundo del arte, la música, los emprendimientos y la gastronomía.

Las Quincenas Culturales se suspendieron desde el terremoto del pasado 16 de abril. Sin embargo, las actividades que se hacen todos los fines de semana, en la calle Junín, se han realizado con normalidad. La novedad, de este fin de semana, será la reapertura, después de 17 meses, de los ciclos de talleres permanentes de pintura y acuarela del Museo Oswaldo Muñoz Mariño.

La calle Junín es un pequeño microcosmos urbano de la cultura quiteña. En este espacio, el Comité de Emprendedores de San Marcos ha armado un circuito que incluye 15 lugares que el público puede visitar. La mayoría estará abierta este fin de semana.

Una alternativa para iniciar el recorrido por este circuito puede ser la esquina de la calle Flores y Junín. Allí se encuentra el Museo Manuela Sáenz. En esta casa hay documentos, efectos personales y accesorios que fueron utilizados por la ‘Libertadora del Libertador’.

Los emprendedores de San Marcos han denominado a la Junín como la calle de los museos. A más del museo de Manuela Sáenz en la misma vía está el Museo de Arquitectura y el Museo Muñoz Mariño.

Cruzando la calle Montúfar está el Cedime, la sede del Comité de Emprendedores de San Marcos. En este espacio, este fin de semana, se realizará una feria de cachivaches y antigüedades.

Fernando Ontaneda, uno de los miembros del comité, agrega que en esta feria se exhibirán joyas elaboradas por los artesanos del barrio. “Daremos espacio a emprendedores para que expongan sus artesanías en una especie de showroom”, dice.

La Junín también es la calle de los talleres de arte. Aquí está el Taller Kespues, de Rodrigo Viera; el Taller de Pintura, de Bolívar Araujo; el Taller de Joyería Artística, de Edwin Páez y Pedro Vicuña; y el Taller de Madera Noble, de José Barrera.

Después de finalizar el circuito en el restaurante La Quinta Paila del Diablo, ubicado cerca de la segunda escalinata de la calle Junín, los visitantes tendrán la opción de visitar la Caracola, un espacio de arte contemporáneo donde se realizan funciones de títeres, teatro, cine y música.

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