La Corte Suprema india propinó hoy un durísimo golpe a la industria farmacéutica suiza Novartis al rechazar una patente de un fármaco contra el cáncer y permitir su producción genérica.
Los jueves decidieron que la industria local tiene el derecho de producir el medicamento Gleeve (mesilato de imatinib) como fármaco genérico de bajo costo para salvaguardar el derecho a la salud de la población.
El veredicto llegó al termino de una batalla legal de siete años, iniciada por la empresa farmacéutica suiza en defensa de las leyes de propiedad intelectual.
En sus argumentos, la Corte Suprema dijo que el Gleevec “no es un producto innovador” porque utiliza una molécula ya conocida y entonces no entra en los criterios establecidos para las “invenciones”. Según varias asociaciones indias de defensa de los derechos humanos, se trata de una derrota severa para la industria farmacéutica internacional y confirma a la India como una “farmacia de los pobres” mundiales.
Tras conocerse el fallo, Novartis emitió un comunicado en el que afirmó que la decisión de la Corte suprema india “desalienta la investigación de fármacos innovadores, esenciales para el desarrollo de la ciencia médica al servicio de los pacientes”. “A Novartis nunca le fue reconocido una patente original para Gleevec en la India. Estamos firmemente convencidos que las innovaciones originales deben ser reconocidas y tuteladas por las patentes a fin de alentar a las inversiones en la innovación médica, en especial en los casos de necesidades clínicas insatisfechas”, dijo Ranjit Shahani, vicepresidente de Novartis India Limited.
“Hemos llevado adelante este caso porque creemos que las patentes tutelan la innovación y alientan los progresos médicos. Esta sentencia representa un freno para los pacientes y obstaculizará los progresos médicos en las patologías para las cuales no hay aun disponibles opciones terapéuticas eficaces”, concluyó.