El artista Fabián Patinho inició esta muestra con retratos fotográficos. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
Un total de 34 pinturas hechas con acrílico, acuarela y marcadores forman parte de la muestra titulada ‘Tres mil leguas de algodón’, del artista Fabián Patinho, que recoge retratos basados en fotografías. Además, en la obra Patinho resalta la técnica del cómic.
Los cuadros, pintados por ambos lados, están dispuestos desde el techo de uno de los pabellones del Centro de Arte Contemporáneo. Todas las obras muestran a mujeres y a dos hombres en ropa interior, en la cotidianidad de su hogar, junto a una ventana.
Patinho se considera “un tipo de ventanas”, pues en cada departamento en el que ha vivido ha elegido sitios con vista panorámica o con balcones. “Me gusta vivir lo más alto posible y con vista hacia afuera, porque soy casero. No salgo de casa pero salgo mucho por la ventana, me gusta mirar hacia afuera como forma de escape pero protegido en casa”.
Las ventanas, para Patinho, representan la relación de sus personajes con su vida íntima y cómo estos ven el mundo. Por eso, algunas de las fotografías fueron hechas en las ventanas de la casa del artista, mientras que otras fueron tomadas en los hogares de sus modelos.
En 2009 hizo su última exposición individual en El Conteiner y esta muestra fotográfica, que ha recopilado desde hace más de dos años, es una continuación de esa muestra. “Hice las fotos y luego, un domingo, me di cuenta de que no había pintado en mucho tiempo y de que había algunas de esas fotografías que podían quedar perfectas como pinturas”.
Los modelos, en su mayoría, son amigos cercanos del artista, y hubo otro par que conoció específicamente para esta creación, aunque opina que, en esos casos, no sintió la misma libertad. “Cuando tomo fotos converso, uso una cámara chiquita y, mientras hablo con el modelo, fotografío. Creo un clima cálido y con las amigas no tuve problemas para la sesión. Fue un clima relajado”.
Los colores y diseños de las cortinas que se ven en las pinturas fueron imaginadas por Patinho, al igual que la ropa interior que lucen los modelos. En un inicio, la idea era colocar dos máquinas dispensadoras de ropa interior con diseños suyos en el pabellón de la muestra, pero no le alcanzó el tiempo para concluirla.
A cada pintura le añadió recortes de revistas de moda en los que se leen grandes titulares sobre el estilo y la belleza. Desde hace varios años, Patinho se ha dedicado a recortar frases de revistas y a coleccionarlas en una carpeta y, aunque la frase no tenga relación directa con la pintura, el artista la colocó porque siente que forma parte de la estética.
“Eso hago porque provengo de la cantera del cómic, donde se plantea una relación entre la imagen y lo escrito”. Como parte de esta exhibición, que estará abierta hasta febrero de 2017, Patinho hará el lanzamiento de un libro que recopila sus fotografías.