Las imágenes de los indígenas se utilizaron en publicaciones. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Ver para creer, la famosa frase de Santo Tomás es utilizada por la antropóloga María Fernanda Troya para dar nombre a la muestra que montó en la galería Arte Actual de Flacso (Pradera y Diego de Almagro) y que se inauguró el pasado miércoles 11 de octubre de 2017.
Esta exposición es resultado de la investigación que hizo para su tesis de doctorado, (es doctora por la Escuela de Altos Estudios de Ciencias Sociales, de París), y en la que estudió archivos de misiones etnográficas y católicas que estuvieron en el Oriente ecuatoriano a inicios del siglo XX.
Para la muestra Troya hizo una selección de 100 imágenes, entre fotografías y postales, con el objetivo de exponer los usos que tuvieron. “Me interesa -dice- que la gente conozca para qué fueron usadas. La mayoría de veces sabemos que forman parte de un archivo pero no nos interrogamos cuál fue el fin que tuvieron”.
En ‘Ver para creer’ hay imágenes del finlandés Rafael Karsten. Un antropólogo que estuvo con los shuar y cuyo trabajo se conoce poco. También hay fotografías de los archivos antropológicos de la Smithsonian Institution y una serie de postales que son parte del archivo personal de Troya.
Una de las ideas que tuvo esta antropóloga para esta muestra es contrastar las imágenes de los archivos con reproducciones de documentos religiosos y científicos donde estas circularon. “Es por eso que en la exposición hay imágenes de diferentes formatos y calidad”.
Las misiones que estuvieron a inicios del siglo XX en el Oriente ecuatoriano fueron itinerantes. Entre ellas estuvieron la Misión Salesiana de Méndez y Gualachiza y la Misión Josefina del Napo. Troya cuenta que por esos años había una fuerte colaboración entre la Iglesia Católica y los etnógrafos y antropólogos.
Entre las imágenes que son parte de la muestra están las publicaciones de la Exposición Misionera Vaticana (una copia de las Exposiciones Universales), en la que los salesianos mostraron desde especímenes animales y vegetales hasta reconstituciones de figuras humanas de los shuar.
Otro de los objetivos de ‘Ver para creer’ es mostrar la circulación de imágenes que sirvieron de propaganda para las misiones. “En los años veinte hubo toda una política por parte del Vaticano favorable a las misiones. Empezaron a circular postales de los lugares exóticos donde tenían las misiones. Esas imágenes se convirtieron en parte del imaginario que los europeos construyeron sobre el trabajo de la Iglesia”.
Los misioneros se convirtieron en una especie de héroes que tenían que superar grandes obstáculos. En muchas de las postales de Troya aparecen hombres con los brazos cruzados o en posición de victoria y atrás los indígenas cargando productos. Las imágenes de los puentes son un motivo recurrente en estos documentos históricos. Otra imagen frecuente es la del sacerdote rodeado de niños.
Troya sostiene que la relación que hay en el occidente cristiano con la imagen es conflictiva e importante. “La imagen sirve para evidenciar lo que está más allá. Lo que no está visible y no se puede ver. Es a través de la imagen que se hace todo el proceso de evangelización en América”.
La exposición de fotografías estará acompañada de una videoinstalación titulada “Etsa Wakan” (Espíritu del sol para el pueblo shuar), de los artistas Rubén Jurado, Mauricio Proaño y Memo Quintana.
Dentro de las actividades paralelas se incluyen talleres de apertura de archivo que se realizarán el sábado 14 y 21 de octubre, visitas guiadas cuyos horarios se pueden consultar en las página de Arte Actual y un conversatorio el miércoles 8 de noviembre, a las 18:00, en que Troya compartirá los detalles de su investigación. La muestra estará abierta hasta el 10 de noviembre de 2017.