Sus palabras tras recibir el Oscar al Mejor actor de reparto, en el 2007, por su papel en ‘No es país para viejos’ fueron sencillas. En español, el actor Javier Bardem dijo: “Mamá, esto es para ti, esto es para tus abuelos, para tus padres, Rafael y Matilde, esto es para los actores de España, quienes han traído, como tú, la dignidad y el orgullo a nuestro trabajo…”.
El Oscar no fue el primer reconocimiento que obtuvo el actor, quien proviene de una familia ligada al arte dramático. En su trayectoria, que se inició con una aparición en la comedia televisiva ‘El pícaro’, en 1974, se han sumado cuatro premios Goya, tres de la Unión de Actores, dos copas Volpi (del Festival de Venecia), uno del Sindicato de Actores, un Bafta, un Globo de Oro, entre otros. En mayo, se alzó con la Palma de Plata al Mejor actor, en Cannes 2010.
El motivo de este último galardón fue su interpretación de Uxbal, en el drama ‘Biutiful’, del mexicano Alejandro González Iñarritu. Si bien el primer papel para cine se lo dio Antonio del Real, en ‘El poderoso influjo de la luna’, fue Bigas Luna quien lo popularizó en España con cintas como: ‘Las edades de Lulú’, ‘Huevos de oro’, ‘La teta y la luna’ y ‘Jamón, jamón’, donde actuó con su actual pareja la española Penélope Cruz.
Con el estadounidense Julian Schnabell, Bardem, quien primero optó por la pintura como su forma de expresarse, dio el salto internacional. La cinta fue ‘Antes que anochezca’, donde vestía del perseguido escritor cubano Reynaldo Arenas. También ha trabajado con Pedro Almodóvar, Michael Mann, Alejandro Amenábar, Milos Forman, los hermanos Coen, Woody Allen…
En el 2001, Bardem visitó el Ecuador. En el país, bajo la lente de John Malkovich, grabó algunos momentos de ‘Pasos de baile’, un filme que trataba sobre el Perú, en los años de conflicto con Sedero Luminoso.
El actor ecuatoriano Diego Naranjo, quien compartió escena con el español en ese filme, recuerda la solvencia de Bardem: “Llegaba el momento de la filmación y sin mayores repeticiones o correcciones, la toma quedaba lista. Muy profesional, sencillo y poco comunicativo”. Naranjo, además, observa en el actor un proceso de maduración por los papeles que ha desarrollado.
Villano o galán, asesino o artista, son muchos los rostros que Bardem ha mostrado. Sobre su apariencia física ha dicho: “Me considero no sexy. No me obsesiona. Lo que quisiera mostrar en pantalla o en escenario son seres humanos, y los seres humanos usualmente no son tan guapos como las estrellas de cine”, dijo Bardem
En esa línea, el preparador de actores León Sierra considera que en sus primeros papeles lucía ‘sex appeal’ y tosquedad en cuanto a la técnica; pero que hoy tiene solidez y aprovecha con madurez e inteligencia ese ‘sex appeal’.
En cuanto a su forma para encarar la actuación“es un deudor del método Stanislavsky: no es exclusivamente psicológico sino que complementa su actuación con acciones físicas. Tiene problemas de trabajo vocal, pero los suple con su presencia”, dice Sierra.