En el 2014, a escala nacional, el promedio de años escolares en el área urbana fue de 9,8. Foto: EL COMERCIO
Dos de los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio, que el Ecuador se comprometió a cumplir hasta este año, se centran en asegurar que todos los niños completen su educación básica y se eliminen las desigualdades de género en todos los niveles de la enseñanza.
La tasa neta de asistencia de estudiantes en educación general básica del país pasó en los últimos ochos años (2007-2014) del 91,4% al 96,2%. Este logro en buena parte se debe a la gratuidad de la educación en todos sus niveles. Sin embargo, para Milton Luna, del Contrato Social por la Educación, estas cifras corroboran una tendencia creciente que en el país se experimenta desde antes del actual Gobierno y coincide con el crecimiento en cobertura de educación en América Latina.
En el caso del bachillerato, aún hay un camino por recorrer para lograr los objetivos, la tasa neta de asistencia creció del 51,2% al 65,1% en el mismo período. Luna añade que analizar los logros en términos de acceso ya es viejo, porque el problema estructural hoy se centra en la calidad educativa. De ahí que considera que hay un claro déficit en las reformas respecto a la profesionalización y la capacitación del docente para lograr cambios significativos.
Hasta el 2014, según el Ministerio de Educación, se capacitó a
59 069 docentes en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). En el mismo período, otros 2 322 fueron inscritos y matriculados para cursar maestrías internacionales. Actualmente, 18 790 profesores están en cursos de actualización profesional de 330 horas. Según el ministro Augusto Espinosa, el 70% de los docentes de educación regular se encuentra capacitándose en distintas áreas y la meta es que 134 000 miembros del Magisterio desarrollen algún curso de actualización de conocimientos hasta el 2017.
Otro de los pendientes también es el rezago educativo. En el 2014, a escala nacional, el promedio de años escolares es de 9,8 y en las zonas rurales el problema es mayor, pues solo alcanzan los 7,4 años, es decir, solo completan educación primaria. Para Luna este es un problema de los últimos 20 años y si se compara con la Población Económicamente Activa (PEA) casi el 90% de esta población tiene este inconveniente.
El abandono escolar en octavo año de educación general básica bajó a 6,7% hasta el 2013, último año que el Ministerio de Educación transparenta las cifras en su página web. Pero en el primer año de bachillerato se ubicó en el mismo año en 8,7%. El 31,4% de estudiantes, entre 5 y 17 años, dejó sus estudios por falta de recursos económicos, el 15,5% porque no estaba interesado y el 12,5% porque tenía alguna enfermedad o discapacidad, en el 2013, según esta Cartera de Estado.